UB40 hizo bailar en la noche del viernes a las 2.000 personas que abarrotaron el Parque Torres con 19 temas interpretados en 90 minutos de reggae decimonónico, con hasta 7 versiones de clásicos, desde Presley a Neil Diamond pasando por Willie Nelson, en el penúltimo concierto de La Mar de Músicas.

Un público entregado apenas ocupó sus asientos y disfrutó con los temas mas famosos de la banda británica como Red Red Wine, que cerró la actuación ante de los bises, o Can't Help Falling In Love, con la que terminó el espectáculo liderado por los hermanos Robin y Duncan Campbell, así como por el bajista Earl Falconer.

Este último fue el que logró modificar el tono pausado de los primeros minutos de la actuación cuando salió a cantar Reggae music del disco Promises and lies poco después de que escucháramos la adaptación al reggae del Blue eyes crying in the rain de Willie Nelson.

Acto seguido salió el percusionista Norman Hassan a animar más el anfiteatro con Boomshacka y Johnny Too Bad de los Slickers, tras lo que interpretaron Here I Am (Come And Take Me) de Al Green.

El arranque del concierto fue de lo mejor con ese recuerdo al primer single de la banda en 1980 Food for Though, y también hubo un momento para el homenaje al gran Rober Palmer con I 'll be your baby tonight, así como espacio para la nostalgia con el clásico de Eric Donaldson Chery Oh Baby, que popularizaron en los 70 los Rolling Stones.

Un concierto en el que desde el escenario se animaba a tocar las palmas con entusiasmo, o a cantar las canciones más populares, lo que tuvo respuesta inmediata en un lugar especial para disfrutar de la noche, en lo alto de la ciudad.

Vestidos de negro desde el minuto uno invitaron al público cartagenero a mover los pies con una sección rítmica magnífica completada por el batería James Brown, así como una sección de viento espectacular encabezada por Brian Travers.

El inconfundible sonido nasal de los hermanos Campbell no fue tan fresco como en los años 80, pero sí que fue tan potente en los momentos estelares en los que estuvieron atentos y comunicativos. Hoy en día recorren el mundo como embajadores del reggae, un género que alguien dijo que murió con Bob Marley, cuestión incierta.