Tenemos hoy una deliciosa ´frittata de tomate y calabacín´ que os recomiendo con insistencia. Un bocado delicioso con lo mejorcito de nuestra huerta, que nos permite disfrutar de una cena o comida saludable y de lo más apetecible.
Las frittatas se cocinan en sartén o cazuela y terminan de hacerse al horno, lo que las hace todavía más irresistibles. El que prueba, repite, ¡garantizado!
INGREDIENTES
Dos cucharadas soperas de aceite de oliva virgen, sal, pimienta negra molida, una cebolla morada, dos calabacines medianos, una cucharada sopera de tomillo, una cucharada sopera de orégano, ocho huevos grandes, 200 ml. de leche semidesnatada, 150 gramos de queso parmesano y seis tomates pera.
ELABORACIÓN
1. Ponemos en una sartén profunda o cazuela resistente al horno, el aceite de oliva y añadimos la cebolla cortada en juliana y el calabacín limpio (con piel ) y cortado en rodajas del mismo tamaño.
2. Cocinamos a fuego medio durante 8 - 10 minutos, removiendo de vez en cuando. Salpimentamos.
3. En un cuenco grande batimos los huevos, leche, queso parmesano, orégano, tomillo y sal, con una batidora eléctrica o unas varillas.
4. Vertemos esta mezcla sobre los calabacines y cebolla que tenemos en la cazuela o sartén.
5. Lavamos y secamos los tomates con papel de cocina y los cortamos en rodajas del mismo grosor.
6. Los escurrimos bien del posible líquido que puedan soltar y los colocamos sobre la mezcla que tenemos en la sartén.
7. Espolvoreamos con algo más de queso parmesano y orégano la superficie y cocinamos a fuego suave hasta que comiencen a dorarse los bordes.
8. Luego metemos al horno precalentado a 180 grados, calor arriba y abajo sin aire y horneamos a esta temperatura hasta que veamos la frittata cuajada y doradita. Servimos recién hecha.
