El Plásticos Romero Cartagena ha esperado a la última jornada de la primera vuelta para vivir el encuentro más importante y a la vez más emocionante de esta temporada. Y es que el bloque cartagenero se jugará en el Palacio de los Deportes de Cartagena a partir de las nueve de la noche -emitido por Teledeporte- la posibilidad de disputar la Copa de España 2018 que se celebra en Madrid el próximo mes de marzo.

Para poder entrar en el torneo copero el equipo entrenado por Juan Carlos Guillamón no solo debe hacer sus deberes, sino que además tiene que esperar que otros, los que están delante suya, no los hagan, como es el caso de Aspil Vidal Navarra y Levante.

La victoria ante el equipo palmesano es fundamental para mantener viva la esperanza y la ilusión de un equipo que podría acceder por vez primera en su corta historia a dicho torneo.

La derrota en el último encuentro liguero ante precisamente los navarros ha mermado considerablemente sus opciones. Son ellos los que en mejor predisposición se encuentran en estos momentos para coger una de las dos últimas plazas que están en juego. Son 18 puntos los que tiene el bloque dirigido por Juan Carlos Guillamón, los mismos que Levante, que anda noveno y uno menos que Ribera Navarra, que es el octavo en la clasificación general.

En el caso del Plásticos Romero llegó al penúltimo encuentro en una gran disposición, con la goleada que le infligía a Gran Canaria. Ahora todo está a expensas no solo de su buen encuentro ante un Palma, que está en sexta posición y aspira a la quinta, sino de una carambola con varios implicados.

El bloque cartagenero ha disputado hasta el momento siete enfrentamientos en su cancha, de los que ha sido capaz de solventar cuatro con victoria, además de un empate y dos derrotas. Palma, por su parte, es el segundo peor equipo de los ocho que están arriba lejos de su cancha. Ha ganado a domicilio solo dos partidos de los siete que ha encarado y ha perdido en cuatro oportunidades.

El club cartagenero espera que la afición apoye en un partido que puede resultar histórico. Además, el escenario es único, un Palacio de los Deportes que aun sin estar a pleno rendimiento se encuentra en condiciones para acoger encuentros como éste, como ya ocurriera en octubre en el derbi.