La complejidad de la décimotercera jornada liguera en División de Honor obliga este fin de semana a dar un paso al frente a los equipos de la Región de Murcia. Solo el Real Murcia, que es el tercer clasificado, afronta un duelo que, sobre el papel, parece más fácil que el de los conjuntos restantes.

Abre la veda el Ranero, el equipo que dirige José Mapeka y que se encuentra en un estado de forma envidiable. Tres victorias, un empate y una derrota es el bagaje que atestigua el buen momento que atraviesa la escuadra verde, que vuelve a jugar lejos de su feudo tras ganar la pasada semana al UCAM Murcia en Santiago El Mayor. Hoy, a partir de las 16.00 horas, visitan al complicado CD Roda, en un duelo que medirá las fuerzas de quinto y sexto clasificados, ambos igualados con dieciocho puntos en la tabla.

Por su parte, el UCAM Murcia afronta una de las salidas más complicadas del curso, ya que visitará Valencia para medirse al Levante -cuarto clasificado-. Además, no ha sido una semana fácil para la plantilla universitaria, ya que el pasado lunes, la junta directiva notificaba al técnico Julio Cardozo que era destituido de su cargo. El choque dará comienzo a las 18.00 horas.

En el último bando capitalino, el Real Murcia regresa a casa tras dar lo mejor de sí la pasada semana frente al líder, el Atlético Madrileño (4-3). El equipo de Javi Motos, tercero en la tabla a un único punto de los puestos de Copa del Rey, reciben a un Alboraya instalado en puestos de descenso desde hace muchas jornadas, pero que, sorprendentemente, ha conseguido siete de los once puntos que registra en su casillero lejos de su estadio. Un partido al que los granas deberán tenerle respeto, y que arrancará mañana a las 12.30 en el Campus de Espinardo.

Por último, el Torre Pacheco de José Nicolás cierra la jornada con un auténtico partidazo, ya que recibirán mañana por la tarde (16.30 horas) en el Virgen del Pasico al segundo clasificado, el Valencia. Necesita el conjunto rojillo regresar a casa, junto a su afición, para recobrar las mejores sensaciones y recuperar la pizca de suerte que les ha faltado en las últimas semanas, condicionantes que les han privado del triunfo en las últimas cuatro jornadas. El rival es difícil de batir, pero no imposible en cualquier caso.