La mejor Copa de los últimos años llega en el peor momento para un Real Murcia que sigue sin levantar cabeza en el campeonato liguero con tres entrenadores y dos victorias en diez jornadas que lo tienen rozando el descenso y esta noche visita la Nueva Condomina ni más ni menos que el FC Barcelona de Ernesto Valverde, un equipo que no se parecerá absolutamente en nada al que juega en Liga y en la Champions y en el que los menos habituales tendrán que hacer méritos para que el técnico azulgrana pueda premiarles luego con minutos en partidos más importantes.
El Murcia ha sido muy solvente en la Copa del Rey y ha dejado en la cuneta al Cacereño, Racing de Ferrol y Olot, lo que le otorgó el premio de poder quedar emparejado con un grande, que finalmente resultó el Barça. Sin embargo la preocupante situación deportiva del Murcia actual es tan grave que lo que debería ser una fiesta por recibir al Barça se ha convertido un poco en una obligación que hay que cumplir.
El delantero Víctor Curto, quien marcó seis de los 10 goles del equipo en las tres eliminatorias previas, no estará sobre el terreno de juego al haberse lesionado de gravedad. Otros futbolistas como el argentino Fede Vega, Fran Carnicer, Xiscu Martínez y Pedro Martín también arrastran molestias y todos ellos se perdieron el último encuentro que el Murcia disputó con derrota por 3-2 en el campo del San Fernando, por lo que parece lógico que estos efectivos no arriesguen ante el Barça pensando en el trascendental choque ante el filial del Granada el domingo también en la Nueva Condomina.
José María Salmerón, que debutó en San Fernando y que es el tercer técnico que tiene la entidad en la presente campaña tras Manolo Sanlúcar y Víctor Basadre, comentó que había que «ser positivos y rápidamente levantar la cabeza, arreglar lo que hemos hecho mal y competir en el siguiente partido». El andaluz no dio pistas de la alineación que dispondrá, pero lo normal es que introduzca bastantes novedades e incluso a algún futbolista del filial entre los citados. A las posibles bajas se suma la del centrocampista Juanma Bravo, quien ayer se torció un tobillo.
El Barcelona afrontará la ida de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey con una versión en la que la mayoría de titulares no estarán, ya que Ernesto Valverde ha concedido permiso hasta a siete jugadores (Ter Stegen, Sergio Busquets, Iniesta, Luis Suárez, Messi, Paulinho y Umtiti). De esta forma, el equipo catalán pondrá en escena una delantera inédita, sin Messi ni Luis Suárez, y sin el joven francés Ousmane Dembélé, lesionado de larga duración. Así, Deulofeu, Paco Alcácer y muy probablemente Denis Suárez o Aleix Vidal aparezca como tridente ofensivo. El Barcelona llega líder de la Liga, en condición de invicto, pero con un fútbol bastante pobre, como el exhibido en el último partido, en el Camp Nou contra el Málaga (2-0).
La última visita del Barça al campo del Murcia fue en la última jornada de la temporada 2007-08, en la que los azulgrana la cerraron con una clara victoria (3-5). Esta es la séptima vez que el Barça y el Murcia se miden en la Copa del Rey, habiendo pasado en las anteriores seis siempre el Barcelona. En el último desafío, temporada 1987-88, el Barcelona eliminó al Murcia por una doble victoria: 2-0 en el Camp Nou y un 3-0 en Murcia.
