La entrada de Raúl Moro Martín en el accionariado del Real Murcia no cambiará los pasos que el actual consejo de administración del club grana estaba dispuesto a dar desde hace ya varias semanas. El primero de ellos era convocar la tradicional Junta de Accionistas, cita que se cada año se celebra en el mes de diciembre. La fecha se fijará esta misma tarde, en la reunión a la que Guillermo Martínez Abarca ha convocado a todo su equipo. En ella se prepararán todos los detalles para la mencionada Junta de Accionistas, que, tras la conclusión de la ampliación de capital, gana importancia, y es que ese será el día en el que casi con toda posibilidad Raúl Moro Martín tome el mando de la entidad.

Después de inyectar 400.000 euros al club grana con la compra de 3.900 acciones, el extremeño se ha convertido en el segundo máximo accionista, una condición que apenas le asegura nada, por ello ya está trabajando para conseguir que Gestora Deportiva Murciana, en manos de los herederos de Jesús Samper, apoye todos sus movimientos y les permita copar todos los puestos del consejo de administración. Una vez que consigan el OK de Gonzalo Samper, que puede, por un lado, cederle las acciones a cambio de dinero o, por otro, enviar a José Ángel Serantes, como ya hizo en la última junta, para que vote con un sí fundamental para que Moro y su equipo pueda empezar a llevar a cabo sus planes.

Los que no podrán ningún problema serán los actuales consejeros. Tanto Guillermo Martínez Abarca como sus hombres de confianza ya tenían previsto desde hace un tiempo aprovechar la Junta de Accionistas para presentar su dimisión, al considerar que su papel en la entidad murcianista ya había acabado. Ahora, con un inversor, todo será más fácil para el actual presidente murciano, quien, después de liderar la entidad tras la muerte de Jesús Samper, se ha sentido defraudado por la sociedad murciana, que no ha respondido de forma masiva ni en la campaña de abonados ni en la ampliación de capital, en la que el objetivo principal era que las acciones quedaran divididas en el mayor número posible de personas y empresas.

Se desconoce si en la reunión de hoy del consejo de administración en Nueva Condomina, ya aparecerá algún representante de Raúl Moro, que ha aterrizado en la entidad murcianista junto al hostelero Deseado Flores. El albaceteño, que tiene muchas papeletas de entrar en el organigrama del club a partir de diciembre, ha actuado como intermediario en esta operación, y es que ya cuenta con la experiencia que vivió en el FC Cartagena, institución a la que llegaba de la mano de Paco Belmonte y que presidió durante hasta el pasado mes de mayo.

También puede ser que los ojos de Moro en la reunión de hoy sean los de Miguel Martínez. El vicepresidente murcianista, otro de los hombres claves en la entrada del extremeño, se sentará frente a los que han sido sus compañeros en el consejo desde el pasado mes de enero y a los que ha mantenido al margen de sus movimientos. De hecho, el responsable de las peñas, que se ha encargado de transmitir toda la información de la situación actual del Real Murcia al nuevo inversor, tiene todas las papeletas para seguir ocupando un puesto de responsabilidad cuando en diciembre se produzcan los cambios en el consejo.

De momento, Moro Martín ha preferido no hacer ningún tipo de declaraciones públicas. Incluso se desconoce cuando llegará a la ciudad para empezar a transmitir los planes que tiene preparados para le entidad murcianista.