Dice Javier Madrid, jefe del departamento de Scouting del FC Cartagena y adjunto al departamento de metodología de la entidad, que tiene perfectamente definido el comportamiento de una gran mayoría de padres que tienen a sus hijos practicando fútbol en un club. Asegura que con una mera observación durante un entrenamiento o un partido se puede identificar a la mayoría. Así, Madrid reconoce a los ´padres entrenadores´, que suelen desautorizar los consejos que les dan los técnicos a los niños y jóvenes; pero también está el ´padre/madre frustrado´ -aquel que no destacó en nada deportivamente hablando y quier tener una segunda oportunidad con su vástago-, o el ´padre/madre fanático -con comportamientos de hoolingans en los partidos-. También, dice Madrid, está el ´padre/madre indiferente´ -que considera la actividad deportiva como una excusa para tener al hijo entretenido sin preocuparse lo más mínimo por lo que hace- y el ´padre/madre sobreprotector´ -muy pendiente del niño y que no padezca con sus compañeros o el preparador-.

Cada fin de semana hay un reguero de estos padres y madres repartidos por los campos de la geografía nacional y en algunos casos la situación deriva en insultos y agresiones, bien entre los propios padres, con los árbitros o, incluso, con intervención también de los chavales.

Javier Madrid, que a su vez hace de enlace entre la cantera y el primer equipo, ha iniciado junto con el equipo que se ha abierto en la cantera, un proyecto al que han decicido denominar ´Escuela de padres´ en el que el objetivo es que los padres tomen conciencia de la responsabilidad que supone tener a su hijo en un equipo de fútbol, como es el caso del FC Cartagena, y la experiencia para uno y otro debe de ser la mejor del mundo. Su forma de actuar puede repercutir, y de hecho lo hace de forma más que considerable, para que el niño tenga la mejor vivencia del mundo o, por el contrario, sea una experiencia nefasta.

El club ha creado el Departamento de Psicología que se encarga de mejorar las relaciones entre padres, jugadores y entrenadores, así como de la dirección de multitud de charlas grupales. La encargada es la psicóloga cartagenera Rocío Blanco, máster en psicología deportiva.

El objetivo es buscar al padre ideal, que no tome decisiones por el hijo, que lo anime, apoye y se sienta orgulloso -y así se lo transmita- al joven jugador. Se pretende que los padres y madres vean siempre el lado positivo de todo lo que rodea a un chaval durante su fase formativa como jugador -tanto si juega como si no lo hace, o si atraviesa una etapa más complicada-. Debe buscar metas comunes con el entrenador y evitar el enfrentamiento directo con el mismo. Pero, recalca, Madrid, «todo esto no servirá para nada si las pautas que podamos transmitir y los valores que deben interiorizar los padres y madres no son capaces de trasladarlos a su día a día con el niño o la niña».

Paco Sánchez, coordinador de la etapa de rendimiento del Cartagena, apostilla al respecto que la figura del padre o de la madre se presume fundamental para cualquier equipo de cantera «ellos son los primeros que deben saber controlar sus emociones. Su apoyo y respaldo al futbolista es básico para que los niños o jóvenes disfruten de lo que están haciendo y no sientan la mirada atenta de un padre que controla y examina, sometiéndole, en ocasiones, a situaciones estresantes».

A partir de estas premisas, el club se pondrá en marcha en poco tiempo para que los padres y los niños asistan a esta ´Escuela de padres´. Rocío se presentará la próxima semana a los entrenadores de los diferentes equipos de la cantera y el siguiente paso es mantener una presentación con los progenitores de los niños que forman las bases y explicar el proyecto. «Trataremos de justificarles la importancia de escuchar lo que queremos decirles y cuáles son los objetivos que perseguimos», añade Madrid, «está claro que esto no es obligado para nadie, pero va a sumar en la armonía de un club y de la relación padre e hijo».

La responsabilidad del progenitor en la vida deportiva del hijo o las conductas deseadas para padres y madres en un campo de fútbol serán algunos de los temas a tratar en este periodo, en el que todos tratarán de aprender gracias a la experiencia de unos y a los conocimientos de otros.

Tampoco quieren descuidar el aspecto nutricional de los jugadores, por lo que se impartirán unas nociones mínimas necesarias para que los futbolistas sepan qué deben comer, cuándo y con qué frecuencia. En este caso la encargada de impartir las clases es la nutricionista Lorena Luján. «Es necesario que comprendan que hay que llevar una alimentación saludable para tener una vida como deportista plena», indica Paco Sánchez. De alevines hacia adelante acudirán solos a las clases, porque, afirman desde el club, debe ser responsabilidad de los jóvenes lo que comen. Los más pequeños, prebenjamines y benjamines, acudirán acompañados por padres y madres.

El FC Cartagena ha emprendido un proyecto de cantera en el que no solo cobra importancia el balón, la táctica y el campo de fútbol, es un concepto mucho más amplio, donde la formación en valores se ha convertido en uno de los ejes sobre el que se fundamente este nuevo concepto de bases. Los encargados de estos departamentos quieren que sea muy identificables las señas de identidad y que todo parta por el aprendizaje desde muy abajo, tal y como proyectan desde ahora.