Al Jumilla Carchelo ya no le importan ni los rivales que le vengan por delante en el calendario, ya que necesita una reacción de 360 grados para abandonar el puesto de colista al que ya casi se han acostumbrado los pupilos de Juan Francisco Gea. Para darle la vuelta a la situación, los jugadores vinícolas tienen esta noche en la pista del Levante la oportunidad de confirmar de una vez por todas las buenas sensaciones que ha ofrecido el equipo en las últimas jornadas.

Lo único positivo que se encuentra el Jumilla es que el Levante tampoco es uno de los rivales más fuertes de la categoría y tiene que agarrarse a conseguir un triunfo cuanto antes para no quedar ya prácticamente descartado. En cualquier caso, el Levante lleva en su casillero cuatro triunfos y juega ante su público, por lo que en principio parte como favorito ante un rival que llega con urgencias y que está gastando las últimas balas que le quedan.