El piragüista murciano Carlos García Gutiérrez logró ayer el reto de cruzar en solitario el Mar de Alborán a bordo de un kayak desde el puerto deportivo de Almerimar, en El Ejido (Almería), hasta la bahía de Melilla, tras completar una distancia de 90 millas náuticas (169 km) en un tiempo de 31 horas.

En esta travesía, el deportista de Alcantarilla (Murcia) estuvo acompañado en todo momento por un velero de 42 pies, que, con cuatro tripulantes, le ha brindado apoyo y seguridad en caso de cambios en la meteorología, fatiga del kayakista o cualquier otra causa.

Carlos García, a su llegada a la Ciudad Autónoma de Melilla, declaró a los periodistas que está «muy satisfecho» por haber cumplido el objetivo. «Por lo que me han comentado, nadie lo había intentado anteriormente», indicó.

El kayakista murciano aseguró que la experiencia fue «bastante agotadora y la más complicada» que ha vivido en su «trayectoria deportiva», al afirmar que incluso ha superado la que protagonizó en 2011 en Canadá, en la ´Yukon Arctic Ultra´, una carrera sin paradas de 500 kilómetros y con temperaturas de hasta 40 grados bajo cero.

Sobre la travesía entre Almería y Melilla, explicó que al comienzo tuvo ciertas complicaciones, ya que durante los primeros 70 kilómetros tuvo «el viento en contra y olas de consideración, aunque en los siguientes 30 kilómetros el viento estuvo en calma».