Las espaciosas salas de las que dispone la Fundación Pedro Cano de Blanca albergan actualmente -hasta el 8 de enero- una espléndida y bella exposición de pintura, Los elementos: la fuerza de la naturaleza, de la artista Rosana Sitcha, nacida en Cartagena.

Estructurada en cuatro secciones, correspondientes a los cuatro elementos que, desde los presocráticos griegos, aceptamos está formado nuestro planeta, y los más cercanos a nosotros y que forman nuestra naturaleza: Volátiles (el aire), Frágiles (el agua), Terrenales (la tierra), e Incandescentes (el fuego).

Formatos enormes y de reducido tamaño llenan las salas de la parte alta, con los motivos plásticos en ese orden: aire, agua, tierra, fuego. La femineidad de los modelos se contempla con el movimiento, en apariencia estático de cada cuadro, y vivo por la fuerza que la artista les impone, según cada dirección de los elementos.

El marco del Museo de la Fundación es el adecuado para esta exposición única, en la que no se ha escatimado ni un ápice de gusto para que resulte perfecta en todo.

Si los cuatro elementos naturales sugieren a la pintora tanta belleza apoyada en los rostros de las modelos, no quedan de más, sino que sirven de acompañamiento y complemento, los textos del catálogo (hermoso, y de los que se conservan para siempre). Son los de María Carmen Sánchez-Rojas Fenoll y Juan García Sandoval, directora del Museo y comisario de la exposición, respectivamente; y de las aportaciones literarias de María Teresa Cervantes (poema al aire), de quien estas líneas escribe (poema al agua), de Pedro López Morales (texto acerca de la tierra) y José Belmonte (recreación literaria sobre el fuego).

Textos y poemas, incluidos todos en las páginas del bello catálogo que, detenidamente leídos, no siguen sino la inspiración de Rosana Sitcha, insuperable y suprema entre los pintores contemporáneos, con trayectoria corta todavía, vital y artísticamente.

Juan García Sandoval, museólogo, crítico de arte y, como ya indicamos antes, comisario de la exposición, en una amplia introducción a Los elementos: la fuerza de la naturaleza, dice que Rosana Sitcha es una virtuosa de las percepciones y una provocadora de las sensaciones en el espectador? Todo un estudio, que hay que leer detenidamente.

Rosana Sitcha ha sido un descubrimiento para muchos amantes de la pintura en este otoño. A ella ya se la conoce en Norteamérica, por ejemplo, donde su pintura es valorada. Sitcha es una artista que, estamos seguros, no se desvirtuará en un futuro y con el éxito, porque se inspira y elabora desde la verdad, la luminosidad y el enigma con que nos asalta los sentidos su contemplación y sensación de la existencia?

Un poeta, precisamente de los años en que la pintura retomó la dimensión del realismo (en el que puede indagar hasta el infinito), los iniciales años setenta y ochenta del pasado siglo, dejó escrita una elegía, en la puerta dice: «La vista es lo primero que se ve, el oído después, después el tacto, el gusto y el olfato al final. / Eso dicen los monjes tibetanos que escribieron el libro de los Muertos». Este poeta fue el esteta y excéntrico Steve Abbott; parece que lo diga de la pintura de Rosana Sitcha.