Charo López protagoniza mañana en el Teatro Circo de Murcia Ojos de agua, un monólogo basado en La Celestina escrito por Álvaro Tato que habla del tiempo despiadado, la belleza perdida, el precio de la dignidad y la resistencia a la muerte.

¿Qué no se dice en la Celestina? ¿Cómo fue la juventud de la alcahueta? ¿Que sucedería si hubiera sobrevivido a las cuchilladas? son las preguntas que se planteó el dramaturgo para Ojos de agua, dirigida por Yayo Cáceres y protagonizada además por Fran García y Antonio Trapote.

«Celestina es teatro puro, porque es presente, y es presente porque es libre. Su soledad es el precio. Su lucidez es la condena. Dueña de su cuerpo, su mente y su espíritu, como el hidalgo manchego, pero aún más radical en su libertad conquistada y en el precio que paga por ella». Así definen autor y director a la protagonista de esta historia.

El montaje de Ojos de agua pretende, por tanto, ofrecer un espacio mágico donde se mezclan los planos de la vida de esta Celestina refugiada, un personaje inmortal que interpreta una de las grandes actrices de la escena española en nuestro país.