Ángel Pardo es el dueño del local donde se desarrollan las ‘Historias de un Karaoke’ que se representarán en el CAES. Como los clientes él también subirá al escenario. Su canción será Libre, de Nino Bravo.

¿Qué personaje interpreta?

Yo soy Raúl, un hombre de pueblo que tiene un problema. Los cuatro personajes de la obra tienen problemas que ocultar y que no voy a desvelar, porque al poco de empezar la obra cada uno lo explica.

Su personaje regenta un karaoke.

Sí, porque cree que todos tenemos una canción que nos puede alegrar la vida y hacernos olvidar los problemas.

Además del suyo, hay otros tres personajes en Karaoke.

Sí, son gente que aparece por el local para compartir sus soledades. Y todos tienen esa canción que les quita los fantasmas de la cabeza.

Entonces, es una reunión de solitarios con algo que ocultar.

Pues sí. No sé si el 100%, pero seguro el 80% de la sociedad es así (risas). Pero la obra es en tono de comedia. La gente se ríe con los protagonistas, pero no de ellos, por la pena que dan.

¿Pero es un melodrama o una comedia negra?

Es una comedia dramática. La gente sale del teatro hablando de lo cruda que es la realidad y la vida, pero se ha estado riendo a carcajadas durante toda la función.

Cada uno de los personajes interpreta un tema en la función.

Sí, cada uno tiene su canción. Algunos buscan olvidar con el alcohol, pero ellos van al karaoke, porque al subir al escenario a cantar se sienten alguien. Y en los karaokes de verdad esto también sucede. La gente se lo toma muy en serio.

¿Qué canción canta usted?

Libre, de Nino Bravo..

¡Como nos gusta a los hombres cantar Libre!

Es cierto. La elegimos entre el director y yo. Pero no se trata de un musical. Simplemente cada personaje tiene su canción favorita, y todas son muy conocidas.

También fomentan la participación directa de la audiencia.

Al principio del espectáculo, según el público va entrando, se invita a la gente a que suba al escenario y cante (risas). Y siempre hay alguien que se atreve.

¿Cómo lleva lo de cantar sobre el escenario?

Cuando empecé, hace muchos años, incluso llegué a grabar alguna maqueta. La música es algo que siempre me ha encantado. En mi juventud viví un año en París, y para ganar unos francos para divertirnos, cantaba en el metro con un amigo.