La Comunidad de Regantes del Campo de Cartagena han manifestado que sienten «desesperación, injusticia e impotencia» ante el proyecto de Ley de Sostenibilidad del Mar Menor y las enmiendas presentadas por los grupos de la oposición parlamentarios, que han tachado de «disparate sin sentido y persecución política».

Los regantes insisten en que las medidas que se incluyen en esta legislación «no van a salvaguardar medioambientalmente al Mar Menor, no presentan rigor científico ni técnico, y suponen un gran perjuicio a la agricultura del Campo de Cartagena».

Señalan que este perjuicio «queda de manifiesto tanto en el Estudio de la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT), redactado por el Catedrático Victoriano Martínez Álvarez; en las declaraciones del Colegio Oficial de Ingenieros Agrónomos de la Región de Murcia y de la Asociación Nacional de Fabricantes de Fertilizantes, que señalan la ineficacia de estas medidas y la carencia de base técnica».

La sede de la Comunidad de Regantes del Campo de Cartagena (CRCC) ha acogido recientemente una reunión con las organizaciones agrarias Asaja, Coag y Upa, con la Federación de Cooperarivas Agrarias, Fecoam, y con la Asociación de Productores y Exportadores, Proexport. En la misma también estuvo el presidente el Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura, Scrats.

Ninguna de estas organizaciones entiende «la persecución política hacia la agricultura del Campo de Cartagena» y rechazan que las enmiendas que se quieren incluir en la nueva ley «solo se centran en la agricultura, sin tener en cuenta los impactos de otras actividades que se desarrollan en el entorno del Mar Menor».

A los regantes del Campo de Cartagena «nos preocupa muchísimo la situación del Mar Menor, y llevamos años proponiendo soluciones», sin que les hagan caso.