El consejero de Presidencia y Fomento, Pedro Rivera, dio a conocer ayer la normativa que permite agilizar la puesta en marcha de nuevos negocios ante los representantes empresariales que asistieron a la presentación de las conclusiones del Libro Blanco de la Construcción. Rivera presentó tres instrucciones que aclaran la puesta en práctica de la Ley del Suelo de la Región y que «aligeran la carga administrativa de los procedimientos y aceleran los trámites para posibilitar la apertura de nuevos negocios en un menor plazo de tiempo». Según explicó , la 'autorización excepcional de interés público' permite que una empresa se implante de manera inmediata, y se ha emitido una instrucción para evitar trámites innecesarios y duplicidades a la hora de solicitarla. El consejero informó de que en el último año y medio se han autorizado 71 expedientes con tramitación de interés público, que han supuesto una inversión de más de 44 millones de euros y la creación de 886 empleos.

Otra figura desarrollada es la denominada 'situación fuera de norma', que evita que ciertas instalaciones se queden fuera de la legalidad e interrumpan su actividad. «La instrucción aclara que por tener esta denominación no se puede paralizar un expediente ni impedir la autorización de una licencia, entre otras cuestiones» dijo Rivera.

La tercera instrucción detalla «pormenorizadamente, con supuestos claros, los denominados 'títulos habilitantes de naturaleza urbanística' (licencias, declaración responsable y comunicación previa). Estos instrumentos son más ágiles y aceleran la realización de la obra y, por tanto, el inicio de la actividad económica», indicó.

El consejero pretende unificar las ordenanzas municipales en materia de edificación, para que las administraciones municipales «hablen el mismo idioma, lo cual evitará la actual disparidad de criterios con la que los profesionales se encuentran». Añadió que se trata de una iniciativa pionera, en cuyo desarrollo intervendrán los profesionales.

En el ámbito de la contratación, los componentes de la mesa del Libro Blanco de la Construcción coincidieron en la necesidad de que se premie la profesionalidad y experiencia acreditada a la hora de adjudicar las licitaciones. Rivera dijo que Murcia ya utiliza el concurso.