Si Pedro Sánchez es presidente del Gobierno de España tras las elecciones generales del próximo 20 de diciembre, el AVE llegará a la ciudad de Murcia de manera soterrada, habrá un plan regional de energías renovables «para impulsar una política del agua para el mundo rural» -es decir, se utilizará la fotovoltaica para reducir los costes de la producción del agua desalada- y rescatará a las familias que se han visto atrapadas en los huertos solares. Lo dijo el candidato del PSOE a la presidencia del Gobierno en un mitin que ofreció en el teatro Capitol de Cieza junto a la diputada nacional y candidata al Congreso de los Diputados por Murcia, María González Veracruz, y el alcalde la ciudad, el socialista Pascual Lucas.

Las tres promesas en clave murciana se vieron acompañadas por el recuerdo que el candidato tuvo para los fallecidos bullenses del accidente de autobús que hace casi un año tuvo lugar en la Venta del Olivo, que definió como uno de los peores momentos desde que es secretario general del PSOE. El resto del discurso estuvo centrado en las críticas hacia el PP de Mariano Rajoy. Dijo que si los socialistas ganan las elecciones del próximo 20D, derogarán la reforma laboral del PP y la ley de la educación, y hará que sean las farmacéuticas «las que se aprieten el cinturón, y no los pensionistas».

Impulsar la Formación Profesional, con la creación de 200.000 plazas más para que los jóvenes no fracasen en el colegio, será una de las iniciativas para fomentar el empleo, y para erradicar la pobreza, los 750.000 hogares que actualmente no tienen ingresos tendrán una aportación del Estado. «Vamos a poner en pie la España de las oportunidades, como también lo hicieron Felipe (González) y José Luis (Rodríguez Zapatero) cuando gobernaron este país», manifestó el líder socialista.

En cuanto a la corrupción, Pedro Sánchez afirmó que sacará «tarjeta roja» a todos los que se crucen en su camino, mientras que sobre la convivencia entre todos los españoles, anunció que «reformaremos la Constitución para articular mejor la unidad de España sin Mariano Rajoy y Artur Mas, porque ambos defienden la misma cosa».

Construir un país laico será otro de los objetivos del PSOE a partir del próximo 20 de diciembre, según Pedro Sánchez, quien insistió en que bajo su mandato «ni habrán pensiones congelares, ni disminución de ayudas a los más necesitados ni personas sufriendo un paro de larga duración».

Pedro Sánchez, que visita por décima ocasión la Región de Murcia desde que en julio de 2014 fue elegido secretario general del PSOE, estuvo por la mañana en Cartagena, donde se comprometió a impulsar una nueva política del agua «para que no sea una fuente de conflicto, sino un elemento de cohesión nacional que responda a las necesidades de los agricultores murcianos».

Aseguró conocer la situación de sequía o carestía de agua que sufren los agricultores murcianos y que por ese motivo «tenemos una propuesta firme y clara», como es que desde el Gobierno de España se articulen políticas de cohesión social y nacional para resolver dicha situación, explicó.

El candidato del PSOE admitió que «Murcia es una región importante», pero que hay desafíos que debe solventar como es la falta de oportunidades, la desigualdad, la confianza de las instituciones.

«Es necesario regenerar la vida democrática en Murcia y fortalecer los lazos de convivencia, creando oportunidades para los murcianos y haciéndolo con una política limpia», señaló el candidato del PSOE.