2.100 euros al décimo. En total, 3.780.000 euros. Es lo que ha repartido la popular administración de ´El Gato Negro´, ubicada en pleno centro de la capital murciana, al haber vendido todas las series emitidas del número 76059, posterior al que ha sido agraciado con el 'Gordo'. María Teresa Serrano, gerente de la administración, celebraba ayer con alegría la suerte, que, por un número, no repartió de lleno.

«¡Con la mano tonta he dado el Gordo!», aseveraba María Teresa -que tiene una mano vendada-. «Si doy el 'Gordo', pego fuego a la Trapería, pongo una valla en el Drexco y saco copas de champán», declaraba. Junto a su hermano Fulgencio Serrano -el administrador-, la mujer, entre la alegría y los nervios, no atinó a la hora de apuntar los números en el cartel de la puerta: donde tenía que estar escrito el segundo premio, puso el quinto.

Casi la mitad de los 3,78 millones de euros -alrededor de 90 series- del premio fue a parar a trabajadores y clientes de la venta Airemar, situada en la autovía A-30 en dirección a Cartagena, a la altura de la urbanización Mossa Trayectum. Juan Martínez Antolinos, dueño de la venta, sacó dos botellas de sidra para festejar con sus trabajadores este guiño de la diosa Fortuna. «Lo que más me ha tocado es el orgullo de que ha sido para mis clientes», apuntaba Martínez Antolinos.

Carlos Carrera, empleado de Airemar, mostraba sonriente uno de los décimos del 76059, y comentaba que dedicará el dinero ganado «a pagar púas». «Parece que no es nada, pero te ayuda en algo en estos tiempos que estamos pasando, y los que nos quedan», consideraba el camarero. Carlos Peñalver, otro de los trabajadores agraciados, dijo que destinaría el premio «a tapar algunos 'agujericos' y a los Reyes de los niños»". Por su parte, la joven Irene Madrid, también empleada de la venta, aseguraba que esta es «la primera vez» que juega a la Lotería, «y va y me toca».