La asamblea general de Caja Mediterráneo (CAM) aprobó ayer con el 89,03% de los votos su integración con Cajastur y las cajas de ahorro de Extremadura y Cantabria en un Sistema Institucional de Protección (SIP). El presidente de CAM y del nuevo grupo resultante, Modesto Crespo, expresó su «alegría» por el resultado de la votación, que fue respaldada por 138 de 155 asambleístas presentes y rechazada por 15 (de los sindicatos SICAM, CGT y CSICA), con dos ausencias en el momento de ejercer el derecho al voto.

CAM creará un banco con Cajastur, Caja Extremadura y Caja Cantabria, que empezará a operar a principios del próximo año.

Para Crespo, la aprobación de la denominada fusión fría con las otras tres entidades supone «un hito» para CAM, ya que pasará a formar parte de la quinta entidad financiera española y la tercera agrupación de cajas.

Crespo destacó como principales valores del SIP «la complementariedad» de las cuatro entidades tanto en su distribución dentro del territorio nacional como en su participación en «negocios de distintos sectores». Añadió que la integración en el SIP permitirá a CAM «obtener recursos suficientes» para corresponder sus dos principales objetivos, como son afrontar los proyectos de los clientes y su contribución al desarrollo del territorio. También atender el capítulo de obra social, que seguirá siendo dirigida desde Alicante debido a que este apartado será «independiente» en cada una de las cuatro cajas. Según Crespo, el nuevo grupo surgido del SIP crea un valioso sistema de protección que fortalece al grupo en los mercados.