Un «abandono total» del mantenimiento de los espacios públicos del barrio. Eso es lo que denuncian los residentes de Ciudad Jardín a través de su presidente vecinal, Alfonso López. No obstante, lo que más le urge a éste, según él mismo recalca, es que le arreglen la rejilla del sumidero del local social de la asociación. «En cuanto lleguen las lluvias se nos va a inundar el sótano, llevamos ya ocho meses esperando a que lo reparen», indica López con resignación.
El portavoz vecinal expone que lleva ya presentados en el Ayuntamiento media docena de escritos con reclamaciones para que hagan mejoras en la zona. «He entregado los escritos, se lo he dicho verbalmente a los concejales, y hasta me he reunido en persona con el alcalde José López. Ya no sé qué más hacer. Lo he hecho todo, pero las cosas siguen sin solucionarse», critica. Sobre ello, el vecino reconoce que «con el anterior equipo de Gobierno, al menos cuando llamabas e insistías venían a arreglarte las cosas, pero ahora se pasan la pelota de unos a otros porque cada concejalía es de un partido». En conclusión, el presidente apunta que «hay poca efectividad por parte de este Consistorio, no se toman decisiones, no hay ningún concejal que mande».
Lo que Alfonso López quiere es que se adecente el aparcamiento que hay enfrente de la asociación que preside. «Las plazas no están señalizadas, cada conductor aparca el coche como quiere y el día que tenga que pasar una camión de bomberos o una ambulancia va a ser imposible», vaticina. López tampoco quiere olvidarse de las «históricas» molestias que ocasionan los usuarios de la pista polideportiva. «Aquí llega gente extranjera de otras partes del municipio para jugar al fútbol a cualquier hora del día. El campo no tiene puertas», afirma. Él argumenta que los pisos de la zona son de familias que sólo acuden a dormir por la noche, pero el ruido de la pelota, señala, no les deja descansar tranquilos. López va más allá, y se muestra partícipe de que esta pista sea transformada en zona de aparcamiento. «Ahora mismo está llena de basura, los jóvenes vienen aquí a fumar y beber. Además tiene las vallas rotas y los chicos saltan a la carretera en busca del balón. Cualquier día va a pasar una desgracia», advierte. En la acera que hay tras una de las porterías hay plantados decenas de naranjos que los residentes denuncian que todavía no han sido podados por el Ayuntamiento. «La calle Carmen Conde está llena de estos árboles, en unos días las naranjas van a empezar a caer al suelo. Es un peligro, porque además de ensuciar la calle, cualquier día se va caer una persona aquí», sostiene.
Plagas por no podar
López añade que «la Asociación ya tuvo que cortar las ramas de los árboles que hay frente al local social porque el Ayuntamiento y la empresa que lleva los parques y jardines no se ponían de acuerdo para venir a podarlos». El presidente matiza al respecto que se trata de moreras y cuando empieza a brotar el fruto el lugar se llena de mosquitos tigre. De hecho, el verano pasado ya sufrieron una plaga de estos insectos.
En cuanto a las zonas de recreo infantil, el presidente de Ciudad Jardín señala que «están muy mal cuidadas, incluso con columpios rotos». López también incide en la necesidad de que se poden los arbustos que hay en las plazas públicas, puesto que desvela que muchos jóvenes aprovechan la frondosidad de la vegetación para hacer botelleo por la noche.
