Cuando los legionarios de Roma conquistaban alguna ciudad la dotaban con los servicios públicos más importantes. «Eran los encargados de vigilar la situación de la ciudad: mantenían el orden público y estaban preparados para enfrentarse a cualquier emergencia, como un posible incendio. Ahora más bien serían los bomberos. De hecho la mayoría de los Vigiles de Carthagonova son efectivos del servicio de Extinción de Incendios», explica su presidente, Antonio Sánchez.

El estandarte de los Vigiles simboliza el fuego. Así, en la parte superior de esta pieza se alza una lanza que representa la llama, que junto con el águila romana y las hachas –principales herramientas de su trabajo– forman unos elementos impresionantes.

Esta legión romana se fundó en 1994, año V de las fiestas, y este año, además de seguir siendo la sede del Estado Mayor Romano, estrenan como novedad una carpa reservada para los integrantes del grupo. «Este es el tercer año

consecutivo que el Estado Mayor nos elige como sede. Nuestra función es acoger todas las reuniones de las

legiones en nuestro campamento», señaló.

La crisis también se deja notar entre los Vigiles. «La crisis siempre afecta. Hemos tenido un par de bajas, pero por lo menos, nos estamos manteniendo», dijo su presidente. La cuota de inscripción es de diez euros mensuales, para los mayores de18 años y para los niños es gratis. La legión está abierta a todo aquel quiera inscribirse.

Los Vigiles de Carthagonova tienen en el Feriae Latino, el miércoles de Carthagineses y Romanos, una de sus

principales actividades: la subasta de esclavos benéfica. Se trata de una actividad, en la que hombres y mujeres pueden participar y ser subastados por un fin benéfico.

La participación es libre tanto para los romanos como para los cartagineses y al finalizar el acto reciben un diploma que acredita su participación en la subasta. También en el Feriae Latino, la legión ofrece su plato estrella a los asistentes: las pelotas de los Vigiles junto con el cóctel de sangre de gladiador, que esperan que hagan las delicias de los visitantes.

Asimismo, el jueves de las fiestas, a las once y media de la noche, los Vigiles de Carthagonova tendrán su acto más destacado con la celebración de la boda de sus dioses más importantes Venus y Volcano.