Con las prisas y el cansancio diario, a veces todo lo que necesitamos al final de la jornada es un juego entretenido que no requiera de mucho esfuerzo mental y nos permita esbozar alguna sonrisa, ¿verdad? ¿Qué tal combinar esto con mucha violencia gratuita, asumiendo el papel de un tiburón toro furioso que devora todo lo que se cruza en su camino? Pues la solución se llama 'Maneater'.

El título se reveló en el E3 2018 con un irreverente tráiler donde se dejaba claro una fuerte influencia de la famosa cinta de suspense 'Tiburón' de 1975, dirigida por Steven Spielberg. Lo que no contaba el tráiler es que el título es un divertidísimo juego de rol de acción en mundo abierto (ShARkPG). Aprovechando la nueva edición del juego para Xbox Series y PlayStation 5, que aportan una buena dosis de potencia y velocidad, nos damos un paseo por la playa, merendamos algo y volvemos en un periquete.

El drama del pequeño tiburón

La historia del juego, que también adopta cierto tono dramático en determinados momentos, encarna la búsqueda de una venganza mostrada en un formato que recuerda mucho a algunas series documentales de naturaleza y que, por cierto, se beneficia de un doblaje increíble en castellano, con bastantes elementos cómicos y diálogos perfectamente adaptados a nuestro idioma, aunque si quieres jugar en inglés, el narrador de la aventura no es otro que Chris Parnell, una figura recurrente del veterano show norteamericano Saturday Night Live.

Nuestra particular aventura comienza tomando el control de un tiburón hembra que siembra el terror entre bañistas y deportistas que disfrutan del mar ajenos a la desgracia que se les viene encima. Todo es perfecto: te comes un turista gordito por aquí, una muchacha por allá, arremetes contra un velero y te zampas a sus ocupantes... Un auténtico paraíso para cualquier escualo con apetito hasta que el infame Scaly Pete, un depravado cazador de tiburones, pone fin a la sangrienta fiesta capturando al animal.

Pero este no es el final de la historia, tan solo el comienzo, porque dentro del barco de Pete, descubrimos de manera brutal que la hembra estaba embarazada. Esto ocurre cuando el cazador le desgarra el vientre para sacar a la cría, momento en el que también lo hiere con su cuchillo. Sin embargo, el pequeño tiburón demuestra de inmediato que no se va a dejar capturar por el asesino de su madre, arrancando una mano a Pete en su desesperada huida hacia el mar. A partir de aquí, la tarea del jugador es asegurarse de que el bebé crezca fuerte y sano, devorando todo lo que encuentre hasta acumular la fuerza y el tamaño necesario para vengar la muerte de su madre.

Hay que comer para poder crecer

Por supuesto, al comienzo del juego eres solo un cachorro de mar y como puedes adivinar necesitarás comer mucha "fruta y verdura" hasta convertirte en todo un depredador. Por el camino no te faltarán aventuras y como sucede con cualquier buen juego de rol, el título adopta un sistema de niveles y mejoras para que nuestro pequeño asesino de los mares ascienda en la cadena alimentaria. Las fases evolucionan desde la infancia a la adolescencia, edad adulta, anciano y Mega, cada uno desbloqueado al alcanzar cierto nivel. Para esto, en el mapa hay distribuidas un buen número de misiones, acontecimientos significativos (que recogen referencias a la cultura pop, como la citada 'Tiburon' o 'Bob Esponja', entre otros), cofre de suministros y mucha exploración. Escenarios llenos de secretos por descubrir y actividades secundarias que se desarrollan entre restos de naufragios, túneles submarinos y depósitos ilegales de desechos tóxicos.

El tiburón es en realidad uno de los animales más peligrosos de los mares, sin embargo, lo cierto es que siguen siendo grandes desconocidos y no se sabe con certeza cuánto ataca. Pero esto no es un problema, porque en 'Maneater' es posible tenerlo siempre enfadado mientras evoluciona. Para esto es necesario devorar humanos, pero ¡cuidado! tomarán represalias si te pasas con el banquete y enviarán cazadores que irán a por ti con una mecánica muy parecida a las persecuciones de policía de cualquier obra de mundo abierto: cuantas más personas te sirvan de alimento, más alto será el nivel de búsqueda y en cada carrera para escapar aparece un famoso cazador dispuesto a poner fin a tu reino de terror. La dificultad de estas batallas va aumentando progresivamente, y algunos enemigos utilizan trucos rastreros a la hora del combate, como el comandante Percy Metcalf, que se esconde tras una especie de escudo eléctrico que rodea su barco, lo que impide que pase a formar parte de la cena inmediatamente. Para superar estas secuencias todo es cuestión de tiempo y fuerza, ya que al cumplir los objetivos y alimentarte, obtienes nutrientes (grasas, proteínas, minerales y el mutágeno X) y puedes mejorar las habilidades que has adquirido.

Una poderosa bestia que aterroriza mares y playas

No hace falta explicar que pasar a la cima de la cadena alimentaria supone retos cada vez más exigentes, también porque la notoriedad ganada con cada fechoría mortal convertirá a nuestro tiburón en un trofeo de caza cada vez más codiciado y, por tanto, perseguido por una multitud mayor de profesionales del arpón. Si bien sembrar el terror a lo largo de la costa, morder a los surfistas y astillar botes de diversa índole, contribuye a amplificar el atractivo de la experiencia, tanto los sistemas de control como los de combate han sido diseñados para no alejarse demasiado de los cánones impuestos por los juegos de acción y parece presumir, además, de cierta profundidad. Contra los enemigos más fuertes, de hecho, es necesario aprovechar al máximo las habilidades de movimiento para esquivar y contraatacar con precisión y efectividad, tratando de asimilar los patrones del enemigo para minimizar el daño recibido y maximizar los infligidos.

Para ampliar el abanico de posibilidades también existe un sistema de movimiento tridimensional que permite, por ejemplo, lanzarse sobre la superficie del agua para sorprender a nuestra merienda con un poderoso golpe desde arriba. Las mecánicas adicionales relacionadas con el crecimiento, evolución del tiburón, y las características específicas de cada hábitat submarino, también incrementan aún más la variedad.

'Maneater' es un juego fácil de entender, extremadamente divertido y puede llevarte a pasar horas frente a la televisión sin percibir el paso del tiempo. Se puede navegar libremente bajo la superficie, moviéndote sin ninguna sensación de fiscalidad en un líquido que en PS5 (versión analizada) produce un espectáculo asombroso con la combinación de 4K HDR a 60fps y efectos de iluminación, que dan vida al mundo submarino con el soporte de la tecnología de Trazado de Rayos. La implicación del mando DualSense también ayuda a ampliar el rango de inmersión y realmente es como si estuviésemos controlando a una poderosa bestia.

Es importante señalar que aquellos que actualmente dispongan de 'Maneater' en Xbox One o en PlayStation 4 también pueden esperar una actualización completa y gratuita cuando adquieran la consola de nueva generación.

Conclusiones

'Maneater' es muy divertido, irreverente, lleno de referencias a la cultura pop y gráficamente espectacular. El 'SharkPG' de nueva generación de Tripwire se ha ganado, sin duda, un lugar entre los juegos más interesantes del catálogo de lanzamiento de las recién estrenadas consolas. Todos los elementos puestos en marcha para el juego se fusionan en una oferta con un enorme rango de originalidad, además de realzarlo con un sector técnico y artístico que no deja lugar a dudas. La amplitud de los sistemas de juego tiene el potencial de ofrecer muchas horas de entretenimiento y diversidad sin dejar de mantener alto el listón hasta la finalización de la aventura. ¡Bon appetit!