La confianza que ha depositado 2K en Switch nos ha permitido disfrutar del relanzamiento de varias franquicias históricas completamente renovadas, como, por ejemplo, 'XCOM', 'Borderlands' y 'Bioshock'. Esta última, serie de culto de la que todos los jugadores han oído hablar al menos una vez en su vida, ahora se presenta bajo un único volumen en forma de trilogía y ofrece, además de toneladas de contenido, la posibilidad de jugar donde queramos y nos apetezca.

La serie debutó en 2007, con 'Bioshock', seguido de 'Bioshock 2' (2010) y finalizó con 'Bioshock Infinite' (2013). Los dos primeros se ambientan en la ciudad sumergida de Rapture, construida por el magnate Andrew Ryan con el objetivo de crear una utopía apartada de la opresión gubernamental de la década de 1940. El último, sin embargo, se sitúa en 1912 en la ciudad flotante de Columbia sin relación directa con ambos juegos, pero heredando muchas características de la jugabilidad y la historia.

No obstante, existe un denominador común para el trío de producciones: todas lograron enamorar a crítica y público. Esto les permite recibir una nueva versión con cada generación de consolas. De hecho, pasarán los años y 'Bioshock' seguirá realizándose y actualizándose para las plataformas venideras.

Pero ahora es el turno de Nintendo Switch.

Repasar tal cantidad de contenido no se antoja tarea fácil, además de reunir los juegos remasterizados y extras incluidos en 'Bioshock: The Collection', también hay que evaluar qué tal se acomoda la híbrida de Nintendo a la franquicia. Tan solo por el hecho de desplazarse a una consola portátil, ninguna de las entregas y reediciones anteriores es comparable y no queremos perdernos ninguno de los aspectos de la experiencia. En todo caso, invitamos tanto a los conocedores de la serie como a aquellos que por alguna inexplicable razón todavía no la han descubierto, a acompañarnos por este resumen. ¡Vamos con ello!

'Bioshock Remastered': Un faro, una ciudad sumergida y el sueño de un hombre

En 'Bioshock', el protagonista se topa con Rapture tras un accidente en avión. Tras los primeros momentos de incertidumbre, Jack, nuestro protagonista, descubre una ciudad sumergida y movida por ideales políticos. Creada por el magnate Andrew Ryan, la metrópolis submarina busca liberarse de la opresión del gobierno, construyendo en el lecho marino un hogar alejado de las leyes y normas morales terrenales para las mentes más brillantes del mundo. De esta combinación de talentos nacen tecnologías muy superiores a las de la superficie y se crea el escenario steampunk perfecto para la aventura que transcurre durante los dos primeros títulos.

Momentos después de superar el accidente aéreo, un imponente faro en mitad del océano se convertirá en la puerta de acceso de Jack a este grandioso mundo sumergido. Desde aquí, el título de disparos simplemente conduce al jugador por el entorno descubriendo los elementos que dan vida a la ciudad de forma progresiva. La ayuda y guía en esta épica atemporal la encontramos en la figura de Atlas, el líder de la rebelión contra el poder establecido por Andrew Ryan. A cambio, espera que Jack le ayude a regresar a la superficie.

Andrew Ryan: creador y antagonista

A estas alturas seguramente sospeches que los problemas se multiplican allí abajo. Estás en lo cierto. Todo lo producido e ideado en Rapture inicialmente señalaba al progreso hasta el descubrimiento del Adam, un líquido extraído de los moluscos que es capaz de modificar el código genético de los seres humanos y otorgarles habilidades eléctricas, sobre el fuego, el control mental o manejar enjambres de insectos. La sustancia no tardó en convertirse en algo sumamente cotizado, dejando a todos los habitantes sedientos de más Plásmidos. Las personas con esta adicción se denominan splicers y han llevado a la metrópoli al caos total.

Si la interesante trama no fuera suficiente, la producción plantea preguntas filosóficas sobre nuestra sociedad y deja muchas otras abiertas a la interpretación del propio jugador. Uno de los recursos más interesantes para conocer las múltiples vertientes de la historia son las grabaciones esparcidas a lo largo del recorrido, que revelan testimonios desde diferentes puntos de vista sobre los hechos. Es una de las principales formas de entender lo sucedido en Rapture, que no por casualidad, está construida sobre un universo tan atractivo.

'Bioshock 2 Remastered': Un lugar ideal para niñas y padres

Con las mismas formas se presenta 'Bioshock 2'. Esta aventura tiene lugar aproximadamente una década después de los eventos del primer título y explora un aspecto muy específico: las Little Sisters y los Big Daddies. El protagonista encontrará una Rapture semidestruida y una nueva mente brillante liderando la ciudad, Sofia Lamb. La doctora ha tomado los recursos de la metrópolis para crear una nueva raza de humanos.

Cuando Rapture encontraba su mejor momento no faltaba Adam y sus compartimentos estaban llenos de gente feliz. Pero rápidamente las existencias del líquido milagroso se terminaron. Se necesitaba una fuente más fiable para extraer el elemento, que eventualmente implicaría extraerlo de personas muertas. Los estudios científicos concluyeron que, al implantar el molusco marino que genera de Adam en el cuerpo de niñas, estas podrían reutilizar este recurso para extraer el preciado elemento de entre los muertos. Estas son las Little Sisters.

Por lo general, las niñas viven en orfanatos y desde allí se convierten en expertas exploradoras de la ciudad buscando cuerpos para extraer más Adam. Cuando Rapture sucumbió al caos, los más pequeños quedaron sin protección y fueron atacados por Splicers sedientos de más poder. Más tarde, algunos de los varones utilizados para concebir a las niñas modificaron sus cuerpos para dar forma a los Big Daddies, criaturas enormes y peligrosas que crean un vínculo indestructible con una sola Little Sister, protegiéndola a cualquier precio.

Delta y su Little Sister

Esto no es nuevo, el título anterior ya cuenta con estos personajes y se daba al jugador la posibilidad de matar a las Little Sisters, para extraer más Adam o salvar sus vidas y obtener una cantidad menor de la sustancia. La diferencia aquí la marca el protagonista: un padre de los primeros experimentos llamado sujeto Delta y su Little Sister, Eleanor Lamb, la niña que debemos salvar.

En un lanzamiento como este, en forma de colección, contar con una entrega que nos invita a conocer y explorar un poco más de 'Rapture' con una nueva aventura, es una oportunidad inmejorable. Además, la secuela mejora algunos aspectos como la cámara, que ha evolucionado hacia versiones más fluidas; la interfaz del juego y las interacciones de los jugadores. Del mismo modo se puede ajustar el equilibrio entre las tres dificultades disponibles (fácil, media y difícil), lo que ofrecerá desafíos para los jugadores menos experimentados sin frustrarlos. Gráficamente se mantiene el nivel artístico de la anterior entrega, pero nos permite descubrir una historia completamente diferente, un poco menos filosófica y más centrada en los aspectos personales.

'Bioshock Infinite': del profundo océano al cielo abierto

'Bioshock Infinite' es la tercera joya de la corona. Si bien se enmarca en una época anterior al título original y geográficamente a mucha distancia de la ciudad sumergida, se repiten varios elementos: Booker DeWitt, el protagonista, debe salvar a la joven Elizabeth. El personaje parte desde un faro en medio del océano que lo lleva a los cielos: a la ciudad flotante de Columbia.

Una vez más, habrá que plantar cara a un líder totalitario, un hombre llamado Zachary Comstock, que además mantiene cautiva a Elizabeth. A partir de aquí, se construye un escenario muy diferente donde el culto a Comstock y una profecía sobre el regreso del falso pastor (DeWitt) desencadenan una serie de hechos que llevarán el caos a la ciudad. Si todavía no es suficiente para ver las similitudes, también encontrarás bebidas llamadas Vigorizadores, que dan a sus consumidores poderes eléctricos, de fuego, mentales y otros muchos, la variedad es amplia.

Incluso con diferentes premisas, hay infinidad de puntos que conectan las historias del primer y tercer título para cerrar el conjunto, y esta es la marca de la franquicia: en un mismo universo, proponer tramas que plantean aspectos sobre nuestra sociedad, el poder de las superpotencias, la viabilidad de ciudades utópicas y un mismo objetivo: huir. Además de compartir las estructuras del guion, también tienen estilos artísticos únicos y personales: el primero, oscuro y basado en colores neón, emulando a una ciudad del futuro en los denominados "tiempos modernos"; el segundo, más apagado incluso, mientras el último capítulo se entrega a la luz, los sonidos grandilocuentes y los colores vivos, lo opuesto entre aguas profundas y cielos abiertos.

Los seis años de diferencia que transcurrieron entre el lanzamiento de la primera y última entrega también marcan distancia en aspectos como los gráficos y por descontado se percibe más experiencia del desarrollador. Por tanto, es posible comprobar cómo algunos aspectos, por ejemplo, la banda sonora, han evolucionado a lo largo de la trilogía, desde la presencia de algunas canciones de época hasta obras maestras de la composición en 'Bioshock Infinite'. Pero no te lleves a engaño, no hay mejor ni peor juego entre el primer y el último de esta colección. Son excelentes.

Conclusiones

'Bioshock: The Collection' reúne tres obras ineludibles de la industria del entretenimiento, que influyeron tantos títulos que sería prácticamente imposible nombrarlos a todos. No cabe duda, por tanto, que se trata de una colección indispensable en Switch, tanto para los jugadores que ya conocían la franquicia como para los que no se han acercado todavía a este irrepetible universo. En todo caso, en un texto como este, en el que se comprime mucha información, tan solo podemos dejar una última sugerencia: juega y descubre el resto, te aseguramos que no te arrepentirás.