La aparición de Internet y sobre todo su democratización en la sociedad supuso un cambio de paradigma para la sociedad. No cabe duda de que la World Wild Web, además de suponer una gran revolución a nivel tecnológico, transformó el mundo y al ser humano con él. La era digital ha proporcionado innumerables ventajas que facilitan el día a día de las personas que disfrutan de su acceso. Sin embargo, también ha traído consigo algunos quebraderos de cabeza y ciertos problemas. Uno de los más recurrentes es el olvido de las contraseñas y cómo recuperarla.

Hoy en día, cada individuo posee cuentas en diferentes aplicaciones, redes sociales y correos electrónicos. Ello trae consigo la necesidad de emplear numerosas contraseñas que, en ocasiones, resulta complicado recordar. Algunos, para evitar el problema, optan por utilizar siempre la misma clave, algo nada recomendable por motivos de seguridad. Tampoco es beneficioso emplear contraseñas demasiado simples. En este artículo se resumen algunos consejos para recordarla:

Utilizar tus otras contraseñas

Algunas personas dividen sus cuentas en diferentes bloques a los que asigna una clave determinada. Por ejemplo, utilizar la misma contraseña para las redes sociales, otra distinta para los correos electrónicos y otra para los servicios bancarios. Así, se reducen las claves que han de aprenderse. Si no se recuerda la clave de una cuenta es posible que sea porque se haya utilizado una contraseña correspondiente a otra cuenta. También es recomendable probar con contraseñas antiguas o desactualizadas.

Asegúrate de estar escribiendo correctamente

Aunque parezca simple, en algunas ocasiones no se trata de un olvido de la clave, sino de una mala escritura de la misma. Por ello, ten calma y escríbela despacio, cerciorándote de que la estás escribiendo de forma correcta. Ten cuidado con el botón de 'Bloq Mayús'.

Recuerda cómo era tu vida en el momento en el que se creó la clave

Habitualmente la gente suele decantarse por buscar la inspiración en su vida persona y en el entorno que les rodea para elegir su contraseña. Si recuerdas el momento en el que creaste la cuenta trata de recordar cómo era tu vida y los factores que pudieron influir en aquella decisión. La ciudad natal, el nombre de la mascota, el nombre de un gran amigo o el del equipo deportivo favorito suelen ser candidatos a formar parte de una contraseña.

Prueba las opciones obvias

Si no eres capaz de recordar nada, ni siquiera tienes una remota idea, tendrás que comenzar desde cero. Puedes empezar a probar por las contraseñas más comunes y obvias, como tu nombre completo al revés, o una serie de números: '123456', 'abc123' o la fecha de tu cumpleaños son candidatos. Si logras acceder a la cuenta al recordar una clave de este tipo, sería recomendable volver a cambiarla, ya que resulta muy sencillo poder hackearla.

Relájate y respira

Quizá sea algo muy complicado cuando no se encuentra una contraseña importante, sin embargo, mantener la calma y relajarse puede ser positivo para recuperar la memoria. Expira e inspira de forma calmada. El enfado y la furia no ayudarán a que recuerdes mejor, al revés. Es recomendable no pensar continuamente en ello, despejar la mente y estar calmado puede ayudar a que se ilumine la bombilla.

Usa un programa para recuperar tu contraseña

ara iniciar tu ordenador, existen programas para recuperar contraseñas perdidas y poder acceder al mismo. Para ello, se ha de descargar el software desde otra computadora, guardarlo en un CD o en una memoria USB y colocarlo en el ordenador. El programa, de forma automática, recuperará la información del sistema.

El botón de 'He olvidado mi contraseña'

Si no se ha sido capaz de recuperar la clave, muchas páginas web y aplicaciones ofrecen la posibilidad de recuperar la información asociada a la cuenta con el botón de 'He olvidado mi contraseña'. Tras pulsar el botón, se debe rellenar los campos y seguir los pasos que indiquen. De esta manera, se ofrecerá la opción de recuperar la información y establecer una nueva contraseña. Aunque, nunca sabremos cuál fue la contraseña que no pudimos recordar.