En 2008 Apple puso en marcha una revolucionaria iniciativa que iba a cambiar de forma radical no solo la forma en la que disfrutamos nuestro tiempo libre, sino también el modo en el que vivimos y trabajamos: las aplicaciones móviles. En marzo de ese año, la compañía norteamericana liberaba la versión beta -no definitiva- de su primer kit para desarrolladores -SDK- que permitía crear un nuevo ´invento´ denominado app.

Apenas unos meses después, en junio, el propio Steve Jobs presentaba en la conferencia de desarrolladores de Apple la primera ´tienda virtual´ de aplicaciones, que fue bautizada como App Store. Y ya nada volvió a ser lo mismo.

Esta nueva plataforma permitía que cualquier persona pudiera no solo crear sus propios programas para móviles, sino también distribuirlos por todo el mundo de forma simple y eficaz, sin intermediarios de por medio y sin tener que pagar usureras comisiones. De repente, cualquier joven inquieto con ganas de programar algo nuevo tenía a su alcance clientes de 62 países. Y todo sin moverse de su pueblo o ciudad.

Ese es justamente el caso de Francisco Martínez y de Zacarías Gómez. La aventura de estos dos jóvenes murcianos comienza siendo todavía estudiantes de instituto, cuando, persiguiendo uno de sus mayores sueños -ser programadores- y haciendo uso de su enorme pasión por los videojuegos se decidieron a crear su primer título de entretenimiento.

Programando en los ratos libres que el instituto les dejaba, obtuvieron un inesperado resultado: más de 20.000 usuarios de todo el mundo se registraron en aquel primer triunfo. Y eso no era más que el principio.

Corría el año 2011 cuando Francisco, que cursaba el último año de ingeniería técnica de informática de sistemas, propuso a Zacarías hacer su primer juego para móviles.

Tiendas de aplicaciones como el App Store de Apple ya contaban con miles de apps y cientos de millones de usuarios en todo el mundo. Además, Google había lanzado su propia tienda de aplicaciones para los dispositivos con sistema operativo Android, con lo que era el momento perfecto para que viera la luz su primer juego para móviles: The Mordis.

Este curioso y divertido título fue finalista en varios certámenes en España y el gran éxito que tuvo hizo que tanto Francisco como Zacarías se replantearan su futuro. Así fue como en 2013 y con unos pocos ahorros fundaron Codigames.

Ese mismo año, la aceleradora de empresas emergentes Lanzadera, propiedad de Juan Roig, empezó a apoyar a estos jóvenes murcianos. Codigames, que presentó un proyecto basado en el ´juego social´ y en la experiencia de juego en tiempo real, fue una de las 15 startups -de las más de 4.000 que se inscribieron- que pasaron a formar parte del programa Lanzadera. Tras esa etapa, la sociedad de inversión Angels continuó apostando por este proyecto netamente español.

Desde entonces los éxitos se han ido sucediendo de forma ininterrumpida. Títulos como Schools of Magic o el más reciente Dungeon Legends no solo cuentan con millones de jugadores en todo el mundo, sino que se han convertido en auténticos fenómenos de masas en países como China o Corea, donde Dungeon Legends ha sido elegido como el mejor juego de mazmorras de 2015, un logro al alcance de muy pocos.

Desde que se inició la revolución de las apps, en el año 2008, se han creado más de 2,2 millones de empleos relacionados directamente con el sector de las aplicaciones en Europa, según Apple. Del total, más de 61.000 nuevos puestos de trabajo directos se han creado en nuestro país, y la cifra de desarrolladores que hay actualmente en España, creando todo tipo de aplicaciones para el ecosistema de Apple, asciende a 191.000.

En una época en la que no había centros de formación especializados en el sector de las aplicaciones, Francisco y Zacarías decidieron embarcarse en una autodidacta aventura que les ha proporcionado no solo la satisfacción personal, sino también el éxito profesional.

La pequeña empresa creada en 2012 cuenta en la actualidad con 17 empleados, a los que se unirán 10 más a lo largo de este año. Y es que los originales e innovadores juegos de este estudio independiente español han cautivado ya a más de tres millones de usuarios en todo el mundo, luchando en un sector en el que la competencia es tan numerosa como feroz.

No en vano, el mercado de las aplicaciones para el iPhone, el iPad y el iPod Touch ha recaudado ya más de 36.500 millones de euros en todo el mundo, convirtiendo al sector en uno de los más golosos de la economía digital. Y resulta que unos emprendedores de aquí al lado, made in Spain, le están hincando el diente a ese jugoso pastel a base de esfuerzo, creatividad e ideas innovadoras.