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A pesar de que el Colegio de Enfermería viene reclamando, de forma reiterada, más contrataciones de enfermeras para Atención Primaria con contratos dignos (en cuanto a duración y salario), la situación que ya se vive en los centros sanitarios de la Región está poniendo al límite a los trabajadores que no pueden hacer frente a las necesidades que se están produciendo a diario.

Numerosos colegiados se han dirigido a la institución colegial reclamando más medios para poder realizar su trabajo y un aumento de las plantillas para afrontar esta nueva oleada de la pandemia de covid-19 sin tener que dejar a un lado otras labores propias de este nivel asistencial que son de extraordinaria importancia en la Atención Primaria y que afecta a un elevado número de ciudadanos, muy especialmente a los pacientes crónicos.

Aunque desde el Colegio se reconoce que la Administración está haciendo un esfuerzo por atender estas demandas, se considera imprescindible destinar más recursos para poder paliar el déficit de medios humanos y materiales que padece la Atención Primaria en nuestro país y que se está evidenciando con mayor gravedad en los últimos meses.

Actualmente, los trabajadores de los centros sanitarios de AP han visto como a sus labores de atención diaria a pacientes, seguimiento de crónicos y agudos, labores de formación e información a enfermos y familias, extracciones, curas, atención domiciliaria, consultas telefónicas y otras funciones propias de la Enfermería de AP, se están sumando tareas como triaje, rastreo de casos y contactos de covid-19, realización de test y aquellas que hacen necesaria la actuación de las enfermeras para el control de la pandemia.

Además, de forma voluntaria, las enfermeras están haciendo por las tardes test serológicos a maestros y profesores. Se trata, así pues, de actuaciones que son imprescindibles y que no pueden ser ejecutadas con solvencia y rapidez si los recursos humanos y materiales no aumentan proporcionalmente.

El cansancio, derivado de largas jornadas de trabajo y de falta de periodos de descanso, está haciendo mella entre los trabajadores sanitarios que se ven superados por la evolución del grave estado sanitario al que nos enfrentamos y que, en las próximas semanas y con la llegada del invierno, se puede ver nuevamente agravado por la epidemia estacional de gripe y las patologías respiratorias.

El Colegio de Enfermería espera que las promesas de la Administración sobre el aumento de plantillas se cumpla en breve y se atiendan las reclamaciones que las enfermeras de Atención Primaria, que trabajan sin descanso incluso de forma voluntaria, están poniendo encima de la mesa.