Los dolores de rodilla y cadera son cada vez más frecuentes a medida que envejecemos como consecuencia del progresivo desgaste de las articulaciones o la aparición de algunas enfermedades también asociadas a la edad. Pero también hay otros factores que pueden contribuir a que ambas zonas se resientan a edades más jóvenes.En ocasiones, el dolor obliga a pasar por el quirófano e conlleva la implantación de prótesis artificiales para que evitar que un simple paseo no se convierta en un camino tortuoso. El doctor Alonso Bau, cirujano protésico de rodilla y cadera y miembro de Saluspot, nos detalla cuáles son las principales causas que contribuyen a un mayor deterioro de estas articulaciones:

1. Artrosis: es la causa más frecuente de desgaste articular. Es un desgaste mecánico producido por el uso y por la edad. Es la evolución normal de las articulaciones con el paso del tiempo.

2. Enfermedades reumáticas: la artritis reumatoide en fase avanzada puede destruir una articulación hasta el punto de necesitar una prótesis en edades tempranas.

3. Deportes de riesgo: si practicando una actividad de riesgo en edades jóvenes se sufre una fractura en la rodilla o cadera, es probable que esa articulación a largo plazo sufra un mayor desgaste.

4. Causas raras y factores congénitos: haber sufrido una infección en una articulación o problemas congénitos como trastornos del crecimiento.

5. Tabaquismo: como un factor de riesgo cardiovascular. Todo aquello que provoca riesgo de infarto también aumenta el desgaste de las articulaciones.

6. Diabetes y colesterol: son factores comunes de riesgo cardiovascular que inciden en el desgaste articular.

7. Obesidad: hay dos mecanismos de desgaste articular por obesidad: la sobrecarga de peso corporal y la alteración de los niveles hormonales en sangre que promueven la inflamación y el desgaste del cartílago.

8. Riesgos laborales: realizar esfuerzos de forma inadecuada y continuada genera un desequilibrio forzando posturas que implican una sobrecarga del cartílago.

9. Sobre uso de la articulación: por ejemplo, debido a impactos cíclicos acumulados a lo largo de grandes periodos de tiempo, como ocurre en el 'running'.

10. Algunos medicamentos: tomar corticoides de larga duración puede conllevar una osteoporosis muy avanzada porque los corticoides debilitan el hueso y podría acarrear problemas para fijar una prótesis al hueso.