Cumplir 40 años es un punto de inflexión para la gran mayoría de personas. Se alcanza el ecuador de la vida y un grado de madurez que permite saber cuáles son las prioridades. Pero también en este momento muchas personas entran en crisis.

El aspecto físico que uno tiene cuando llega a esta edad es fundamental. Cuesta mirarse al espejo y ver que las líneas de expresión que surgieron en nuestro rostro a los 30, ahora ya son arrugas, que nuestra tez ya no tiene el brillo de los 20 y que la celulitis o la barriga va en aumento aunque cada vez te cuides más. Así es como cambia tu piel cuando entras en los 40:

La deshidratación

La deshidrataciónEs uno de los factores más característicos cuando se alcanza está edad. Por ello, se recomienda hidratarse tanto por dentro como por fuera. Es decir, la ingesta de agua es clave para mantener una buena piel. Hay que beber unos dos litros al día, según Instituto Europeo de Hidratación. Para combatir la deshidratación facial recuerda lavarte todas las noches la cara y aplicarte un crema especializada.

Adquirir unos buenos hábitos de vida es primordial para cuidar nuestro interior y exterior. Una buena alimentación favorece el rejuvenecimiento de la piel. Consume alimentos antioxidantes como la granada y descarta otros productos que te deshidratan como el alcohol en exceso o el tabaco.Las manchas en la piel

En esta etapa empiezan a aparecer las primeras manchas en la piel. Las manos y las caras suelen ser las zonas más afectadas. Evita echarte el perfume directamente en la piel y no olvides nunca echarte crema protectora del sol incluso en invierno, especialmente en la zona del labio superior, tal y como recomienda la Academia Española de Dermatología y Venereología.

La flacidez

Con el paso de los años el cuerpo pierde firmeza y elasticidad. La mejor forma de combatir la flacidez en cualquier parte del cuerpo es hacer ejercicio. Además, puedes ayudar a la piel con cremas reafirmantes.

Las temidas arrugas

A los 40 las arrugas comienzan a hacer aparición, especialmente en el rostro. Para combatirlas evita exponerte directamente al sol. Cuando vayas a la playa nunca olvides de protegerte de forma correcta. Además de cremas solares, es recomendable el uso sombreros de ala ancha y gafas solares, que te ayudarán a evitar ciertas expresiones faciales.

Si fumas abandona el hábito y proponte llevar una vida lo más saludable posible, en la que una dieta equilibrada sea la base.

Procura también no estresarte demasiado para evitar fruncir el ceño o apretar las mandíbulas. Cuanto más relajados estén los músculos faciales, menos arrugas tendrás.