¿Recuerdas la moda del ´no poo que las famosas pusieron de moda hacer ya un par de años? Esta tendencia defiende que la manera de mantener el cabello limpio y sano es no utilizando champú, sino productos naturales tan simples como el bicarbonato o el vinagre. Sus ultradefensores van incluso un paso más allá y aseguran que lavar el pelo con agua es suficiente.

Aunque se ha demostrado que no es necesario llegar al extremo del ´no poo´, está claro que cada vez dedicamos más tiempo a leer las etiquetas de los champús y demás productos para librarnos de las sustancias que pueden ser nocivas para nuestro cabello y salud.

Porque aunque no te hayas dado cuenta, muchos ingredientes que contienen estos productos pueden provocar debilidad en el pelo, sequedad en el cuero cabelludo o hasta cambios hormonales. Estos son los más habituales:

Las siliconas

Especialmente la dimeticona, una silicona muy habitual en mascarillas y champús hidratantes. Este compuesto se utiliza para que el cabello se suavice y esté más hidratado tras el lavado. Pero para que esto ocurra las siliconas sellan las superficies, provocando que los nutrientes no leguen al interior del cabello. De este modo, el pelo irá poco a poco debilitándose.

Los sulfatos

Seguramente ya te habrás fijado pero unos de los ingredientes que más aparecen en los botes de champú son el Sodium Laureth Sulfate (SLES) y el Sodium Lauryl Sulfate (SLS). Los sulfatos son sustancias que se utilizan para cortar la grasa y conseguir que el champú sea más espumoso. Pero estos ingredientes tan utilizados resecan el pelo al eliminar sus aceites naturales, pueden provocar irritación en el cuero cabelludo y hacen que el tinte dure menos tiempo.

Los parabenos

Desde que un estudio de la Universidad de Reading (2004) concluyera que tienen relación con el cáncer de mama, los parabenos han estado en el punto de mira. Estas sustancias orgánicas se utilizan como conservantes para evitar la aparición de bacterias. Dos de los más habituales, el metilparabeno y el propilparabeno, son eficaces contra el moho y las levaduras, respectivamente. Pero si los parabenos están bajo sospecha es porque pueden alterar el equilibrio hormonal del organismo, pudiendo provocar la caída del cabello.Los colores sintéticos

Normalmente los encontrarás bajo las siglas FD&C o D&C, seguidas del color y un número. Estos pigmentos suelen aparecer en los champús dedicados a cabellos teñidos, esos que fijan el color, y pueden causar irritaciones o sensibilidad en el cuero cabelludo.

La lanolina

Se trata de una cera natural que gracias a sus propiedades hidrófugas se suele utilizar en champús para el cabello seco o demás productos hidratantes. Pero la lanolina contiene alcoholes que pueden provocar reacciones alérgicas, especialmente cuando no está lo suficientemente refinada.

El cloruro de sodio

La sal de mesa de toda la vida es otro de los ingredientes habituales de los champús y suele utilizarse para aportar viscosidad y consistencia al producto. Pero lejos de aportar algún beneficio, el cloruro de sodio consigue más bien lo contrario: que el cuero cabelludo y el pelo se sequen al eliminar sus aceites naturales.