LAS PREGUNTAS DE LOS LECTORES: Tengo un gato blanco al que poco a poco se le ha comenzado a caer pelo de las orejas y estoy muy preocupado. La verdad es que no lo veo mal en cuanto al comportamiento, sigue tan activo como siempre, sin embargo, me he dado cuenta que tiene las orejas ardiendo ¿Qué puede estar ocurriéndole?

Las orejas de los gatos son unos órganos muy sensibles y, dada su capacidad auditiva, especialmente valiosas para ellos. Los gatos poseen en sus orejas más de 30 músculos. Gracias a estos músculos, pueden llegar a girarlas más de 180 grados y multiplicar su potencial. Por eso, todo lo que ocurre en las mismas siempre es importante y hay que valorarlo convenientemente. Por lo que comentas, podría tratarse de una otitis, aunque lo más probable es que se trate de una alergia al sol, es decir, tratarse de una dermatitis solar. Además, esta opción es la más probable porque los gatos blancos o de color claro son muy propensos a las mismas. Esta enfermedad acaba generándoles quemaduras en distintas zonas, aunque donde más visibles se hacen las mismas es en la zona de las orejas. Por todo ello, debes acudir a tu veterinario y que este diagnostique si, finalmente, se trata de un problema alérgico, parasitario o infeccioso.