Seguro que más de una vez has llegado a tu casa, sobre todo después de una larga jornada fuera, y tu perro te ha recibido soltando un poco de pipí al verte. Esto, pese a que suele ser muy poco el pies que echa, puede resultar muy molesto. No obstante, tiene un motivo muy claro y existen varias formas de evitar que esto se repita.
¿Por qué ocurre?
Hay que señalar que, que tu perro se haga pipí encima al verte después de mucho tiempo, es algo relativamente común, ya que son muchos los perros a los que les pasa. Esto se debe a que al verte se sobreexcita o, dicho de otra forma, se pone muy nervioso, lo que hace que pierda el control de sus esfínteres y acabe meándose encima, se trata de una respuesta fisiológica a esta emoción.
¿Cómo hacer para que mi perro no se haga pipí?
No obstante, pese a ser una reacción natural, existen formas para que tu perro no se haga pis cuando llegas a casa, estas son algunas de ellas:
Primero debes de entrar muy lento y tranquilo en casa. Una vez en el domicilio no debes hacer caso al animal, no hay que acariciarlo, ni tocarlo ni darle ninguna muestra de cariño.
Una vez ya se haya calmado un poco ya puedes llamarlo y acariciarlo despacio. El perro tiene que ir a ti, no al revés.
También puedes llevarlo al jardín antes de acariciarlo y darle algunas órdenes básicas como pedir que se siente o que se acueste. El objetivo es que se mantenga concentrado en lo que le estás diciendo y aparque brevemente sus emociones. Es clave hacer esto de forma tranquila.
Si tu perro no se calma debes mantener la compostura y seguir relajado hasta que te imite. Si también se pone muy nervioso o triste antes de que te vayas de casa haz como si fueras a salir y luego no lo hagas. Haz esto varias veces al día dejando al menos un par de horas entre los intentos.
Si ninguno de estos consejos sirve llévalo a un especialista porque es posible que tenga algún tipo de trastorno o si por el contrario se trata de una fase de su desarrollo.
