Recientemente se ha presentado el anteproyecto de la Ley de Protección y Derechos de los Animales, redactada por el Ministerio de Derechos Sociales. El documento, que se trata aún de un borrador, ya ha generado mucha controversia en la población. Una de las medidas que contempla esta ley es la posibilidad de que las mascotas puedan "jubilarse". A continuación te explicamos en qué consiste esto exactamente.

La que será la primera ley que regule específicamente las condiciones de los animales encara su fase final de redacción cargada de polémica. Mientras la ministra del gabinete encargado de la ley Ione Belarra, la define como un "paso adelante histórico", han sido muchos los ciudadanos que han atacado al anteproyecto. Y es que en él se contemplan varias medidas que no le han gustado a mucha gente, como la obligatoriedad de hacer un curso de formación antes de tener una mascota, o la inclusión de un documento identificativo del animal, el conocido como DNI-Animal. También se ha señalado que existen varias condiciones por las que los perros tendrán que "jubilarse".

La "jubilación" de los perros

Este apartado del proyecto de ley contempla la posibilidad de que los perros se "jubilen", esto solo sería, lógicamente, para aquellos que se dediquen a actividades profesionales. Sería a partir de los siete años cuando podrían retirarse. Siguiendo la teoría de que un año natural corresponde a siete en la vida de un perro, estos se jubilarían a los 49 años.

El Periódico, de este mismo grupo de comunicación, ha revelado que este retiro se decidirá "en función de las capacidades tanto físicas como psicológicas que tengan en función del examen que les realicen los veterinarios". También se señala que no podrán ser utilizados de forma profesional hasta que no alcancen los 18 meses de edad. También tendrán unos horarios y descansos marcados durante la jornada de trabajo.

Los perros podrán empezar a trabajar a los 18 meses y "jubilarse" a los 7 años.

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¿Cuáles son los animales a los que se les aplicará?

No solo los perros serán a los que les afecte esta medida, también se impondrá a los caballos que ejerzan una labor profesional. En su caso, la labor comenzaría a los cuatro años y finalizaría a los 23.