Sin entrar en las descabelladas teorías conspiratorias ni las manipuladas versiones oficiales ¿estamos ante una guerra vírica del hombre contra el hombre?

No es la primera vez que nos azota una pandemia. En 1918, la gripe mató a 100 millones de personas. Más que cualquier conflicto bélico o catástrofe natural ¿Puede haber algo mejor para un asesino? Piénselo, destrucción masiva a mínimo coste. Así nació el bioterrorismo que, apoyándose en la ingeniería genética, usa todo tipo de virus, bacterias y patógenos para acabar con la humanidad.

La primera vez que se atacó con bacterias fue durante la Primera Guerra Mundial.

Alemania lanzó una invasión de muermo, una bacteria que mataba a equinos. USA, Rusia y Francia, perdieron miles de mulas, caballos y burros. Sin ellos no podían mover las armas.

Más tarde, en 1927, dos estudiantes americanos planearon envenenar el agua de Chicago con Tifoidea, una bacteria mortal muy agresiva.

Tiempo después, en 1984, varios fanáticos infectaron la comida de una docena de restaurantes americanos con salmonella typhimurium. Mil personas fueron envenenadas.

Nueve años más tarde, un grupo terrorista esparció Ántrax en Tokio y en el 2001 cinco personas fallecieron al recibir cartas con dicha sustancia y otras 22 fueron infectadas.

Se sabe que sustancias como la 'tularemia' o 'fiebre de los conejos', el ya citado ántrax, la viruela, la toxina botulínica, la peste pulmonar o peste negra, o la fiebre hemorrágica viral, son usados habitualmente en las guerras víricas que mantienen los países.

Repito, no es ficción. Verzilov, Litvinenko, Skripal, Kim Jong-Nam o, recientemente Navalny, no son nombres de virus sino de personas intoxicadas mortalmente. Es un dato contrastado, cientos de policías, militares, políticos y empresarios fallecidos estos últimos años en extrañas circunstancias, en realidad, fueron envenenados bacteriológicamente por espías rusos, americanos o chinos.

Por eso, insisto. ¿Es la covid un virus fabricado en laboratorio que, equivocada y fortuita, o, premeditada e intencionadamente, ha sido lanzado contra la humanidad? Para muchos científicos, no cabe duda al respecto.

Así las cosas, a falta de vacuna o tratamiento, vista la destrucción, dolor, propagación y muertes masivas producidas por la misma, sólo hay algo peor que aún se puede hacer y lo han hecho. Se trata de echar la culpar a inocentes animales de su origen y transmisión. En fin, supongo que algunos humanos pueden ser injustos hasta el infinito.