La pregunta de los lectores: En mi casa tengo un cerdito como animal de compañía. Me lo regalaron cuando era pequeño y le he cogido mucho cariño, pero no para de darme problemas. El principal es que es muy listo y me abre todas las puertas, aunque su preferida es la de la nevera. Le pongo candados para que no se coma lo que hay dentro pero me los rompe todos ¿Cómo puedo evitar que se acerque a ella?

Los cerdos son animales híper inteligentes, con un lenguaje propio compuesto de más de 20 tipos de gruñidos distintos, y una alta capacidad para abrir cerrojos, cajones y puertas. Además, poseen una gran memoria y se calcula que tienen la inteligencia de un niño humano de unos cinco años de edad. Como puedes imaginarte, si a eso le unimos la fortaleza que poseen, estamos ante un animal difícil de controlar. Sin embargo, comprendemos perfectamente tu relación con él porque, a la vez, son animales muy sensibles, cariñosos y fieles. El problema es que, evidentemente, un piso no es el lugar adecuado para ellos pero, tranquilo, tampoco lo son la mayoría de granjas en las que viven. Así que vamos a intentar ayudarte para que puedas tener una buena convivencia con él. ¿Cómo lograrlo? Pues usando sus cualidades a tu favor, como, por ejemplo, una de las más evidentes, su inteligencia. Los cerdos aprenden fácilmente. Si le enseñas a que no realice algunas acciones, dejará de hacerlas. Utiliza el premio. Corrígele con un «no» cuando haga lo que no te gusta, pero prémiale con comida sabrosa cuando su comportamiento sea el adecuado. Ten paciencia y sé constante, verás cómo aprenderá rápidamente.