La pregunta de los lectores: Hace unas semanas a mi perro, jugando, otro perro le mordió la cola. El caso es que, desde entonces, tiene una herida que no se le acaba de curar y está siempre infectada porque no para de lamérsela. El veterinario, finalmente, ante la gravedad, me ha aconsejado cortarle la cola. Sin embargo, me he informado y, al parecer, está prohibido ese tipo de amputaciones. ¿Podría tener algún problema si accedo?

La amputación de las orejas y la cola con fines estéticos es un acto que no tiene ninguna justificación y lo único que hace es provocar maltrato animal, por eso se prohibió en su día. Lo que usted me está hablando, sin embargo, es una amputación con fines médicos que nada tiene que ver con la estética. No se debe confundir ambos aspectos. Si su veterinario se lo ha aconsejado es porque, viendo los pros y los contras de esta actuación, el beneficio justifica el perjuicio que se le pueda provocar al animal.

No obstante, si quiere estar más tranquilo, pídale al veterinario un informe donde se justifique la realización de esa práctica. Con el mismo podrá demostrar, durante la recuperación de su mascota, el haber tenido que realizarla. Desgraciadamente, todo eso no sería necesario si durante años este tipo de cirugías se hubieran reducido a los casos estrictamente necesarios pero, como es sabido, no ha sido así. De hecho, todavía mucha gente se sorprende al descubrir que, por ejemplo, los cocker, los rottweiler o los caniches tienen el rabo largo.