El escritor hispano-peruano Mario Vargas Llosa, premio Nobel de Literatura, ha recibido por parte de Hacienda una notificación que le reclama 2,1 millones de euros por deudas con la Agencia Tributaria.

Según ha publicado el portal Vanitatis, Vargas Llosa no está de acuerdo con el fisco. Por ello y como le han recomendado sus abogados, el autor va a mantener la deuda suspendida con el objetivo de demostrar su inocencia en los tribunales.

Sin embargo, para poder suspender dicha deuda, la pareja de Isabel Preysler se ha visto obligado a solicitar una hipoteca privada con la Agencia Tributaria por el montante que se le pide. Para ello, Vargas Llosa ha puesto como aval la casa que tiene en la calle Flora de Madrid, que fue durante mucho tiempo el hogar de él y su exmujer Patricia Llosa.

No obstante, esta vivienda situada en pleno centro de la capital no está a nombre del escritor, sino que, según informa Vanitatis, el titular es una sociedad holandesa denominada Jurema BV, que dispone como máximo accionista de Vargas Llosa.