Un empleado de una compañía de telefonía móvil tuvo acceso hace unos meses al número particular de Cécilia Ciganer, ex esposa de Sarkozy y madre del pequeño.

Según los investigadores, el empleado pasó el número a un amigo suyo, de profesión bombero, que en varias ocasiones llamó a ese teléfono, que Cécilia Ciganer había regalado a su hijo.

El bombero telefoneó varias veces a Louis Sarkozy y le amenazó de muerte, y el niño se lo contó a su madre, lo que activó una investigación que ha permitido llegar a la detención de los dos hombres, que serán juzgados el mes próximo en un tribunal de Bobigny.

La ministra francesa de Interior, Michèle Alliot-Marie, confirmó hoy a la emisora "Europe 1" la solución del caso de las amenazas al pequeño Louis Sarkozy, algo que calificó de "escandaloso".