Da igual el empeño y delicadeza que pongamos, hay veces que es inevitable que acabe cayendo lejía en nuestra ropa, con el problema que esto supone. Y es que las manchas de lejía resultan muy complicadas de quitar y, además, cuesta mucho quitarlas. Sin embargo, con este tip o truco podrás quitar las manchas de lejía de tu ropa.

La lejía, si no se limpia rápido, en la ropa es fácil que la deje descolorida. Mucha gente piensa que no hay opción y que, una vez ocurre esto ya no se puede salvar.

Con este truco, si la mancha es pequeña, es muy eficaz. La lejía como tal no es una mancha, sino que lo que se ve son los efectos que causan en el tejido, que corrompen, levantan y eliminan el color.

Las manchas de lejía como tal no son manchas, sino una decoloración.

El truco para quitar las manchas de lejía

Para aplicar este tip hay que coger un trozo de algodón y echarle vodka o ginebra y frotar sobre la zona afectada. Con esto se conseguirá arrastrar que el tinte de la zona afectada, de tal modo que se distribuya por el resto de la prenda y se disimule menos.

Como ya se ha señalado, el truco funciona sobre todo en machas pequeñas. Si es grande lo más probable es que no pueda resolverlo este truco, aunque puede intentarse con este u otros tips, como sumergir la ropa en lejía.