Desde hace unos años, el reciclaje se ha convertido en tendencia y eso lo demuestran los más jóvenes, que hacen verdaderas maravillas y obras de arte con objetos que para la mayoría son basura. Nos hemos acostumbrado a ver pequeños detalles como lámparas, hechas con botellas recicladas, o pequeños muebles con materiales desechados. Ahora el arte del reciclaje se ha llevado más allá y, con un poco de trabajo e imaginación, se ha construido una mansión con solo tres viejos contenedores de barco y un poco de esfuerzo.

Esta propuesta para una vida sostenible basada en el reciclaje ha sido diseñada por un estudio de Copenhague y desarrollada por una empresa China, logrando reducir el consumo de materia prima y, por consiguiente, evitando la excesiva contaminación del aire y del agua que ocurre a la hora de fabricar dichos materiales desde cero.

Gracias a esta tendencia del reciclaje, el arte se ha fusionado con el cuidado al medio ambiente y se han abierto puertas para la creación y la innovación de nuevas posibilidades.

Por ello, el reciclaje ha abierto la posibilidad a nuevas arquitecturas sostenibles con el medio ambiente, como por ejemplo esta nueva mansión que combina tres viejos contenedores de barco y que ha sido construida con materiales completamente reciclados, tanto en el exterior como en el interior, y absolutamente respetuosos con el medio ambiente.

Estilo minimalista

El interior está decorado en blanco, y con un estilo minimalista escandinavo y basado en el concepto de todo abierto, sin puertas independientes. Los constructores también se han inspirado en un estilo sin paredes y las han sustituido por ventanas que dan un aspecto más amplio y espacioso al complejo.

Con cuatro dormitorios, un estudio y una habitación para los niños, esta casa, además, cuenta con un sistema de recogida de lluvia que la hace auto suficiente y su consumo de energía es un 50 % más bajo que en otras casas de su envergadura gracias también a los paneles solares instalados en el techo.

La primera planta, que está al mismo nivel que el suelo, fiel al estilo escandinavo, cuenta con cocina y comedor que, en vez de contar con paredes que las separen, cuentan con ventanas que conectan el interior y el exterior de la vivienda.