Tras meses de búsqueda y en paradero desconocido, finalmente ha caído. La Guardia Civil, en el marco de la operación 'Bunny', ha procedido a la detención de 'El Conejo', uno de los prófugos más buscados de la Región de Murcia. El pasado mes de febrero dejó heridos a dos guardias civiles en Lorca cuando embistió con un todo terreno al vehículo oficial. Al ya detenido, que ya está en la cárcel, se le atribuyen los presuntos delitos de tentativa de homicidio, amenazas y daños.
La operación se inició en febrero cuando, tal y como adelantó La Opinión, esta persona estaba siendo buscada después de herir a los guardias civiles en la pedanía lorquina de La Escucha. 'El Conejo', que ya está en la cárcel, era un violento delincuente con más de un centenar de antecedentes policiales y sobre el que pesaban tres órdenes judiciales de búsqueda, detención y personación.
Los hechos ocurrieron el sábado 25 de febrero, cuando una patrulla de Prevención de Seguridad Ciudadana se encontraba realizando una vigilancia en torno al domicilio. 'El Conejo' estaba siendo buscado por la justicia para su detención, por varios delitos de amenazas, algunas de ellas con arma de fuego, maltrato animal y violencia de género. Unidades de élite del Cuerpo que velaban por la seguridad en el Carnaval de Águilas en aquella noche se movilizaban a la zona y cercaron la casa del individuo.

En dicha vigilancia, de forma sorpresiva, los agentes vieron aparecer al sospechoso a bordo de un vehículo todoterreno que, sin posibilidad de respuesta, embistió al vehículo oficial con los agentes dentro, dejando a los guardias civiles heridos y el coche con severos desperfectos e inutilizado para el servicio.
Un búnker en su casa
Desde ese momento, el prófugo se hallaba en paradero desconocido, mientras la Guardia Civil mantenía todas las líneas de investigación abiertas para localizarlo, sabiendo que su conocimiento del entorno le permitía moverse y ocultarse en la zona con facilidad y que, pese a carecer de permiso de conducir, se movía en su todoterreno.
Pese a las vigilancias previas que habían realizado los agentes en el domicilio y daban como resultado negativo, la Guardia Civil pudo determinar que esta persona se encontraba en ella oculta en algún lugar.
Por tal motivo, la Guardia Civil procedió a realizar un minucioso estudio de la vivienda detectando una cavidad, habilitada en el techo, donde se escondía el delincuente. Asimismo, los agentes hallaron un segundo zulo de difícil localización, perfectamente camuflado con una plaqueta del suelo, bajo la cama de una de las habitaciones.
Atropelló a varios vecinos
El sospechoso era conocido por su violento comportamiento, lo que le había llevado a ser denunciado en numerosas ocasiones por amenazas. Esta persona ya fue detenida en octubre de 2020, por el atropello intencionado de cuatro personas, cuando se encontraban en la terraza de un bar de El Esparragal-Puerto Lumbreras.
La operación ha sido desarrollada por agentes de Policía Judicial, Seguridad Ciudadana, del Equipo ROCA y del Equipo de Drones para llevar a cabo la entrada y registro de una casa de campo. El detenido y las diligencias instruidas fueron puestos a disposición del juzgado de Instrucción número 7 de Lorca, cuyo titular ordenó el ingreso en prisión del arrestado.