Tribunales

El presunto violador de Balsicas declara que su novia lo acusó de la agresión "por despecho"

La víctima declara con un biombo para no ver a N.H., acusado de agredirla durante más de tres años, y se desdice: afirma que las lesiones vaginales se las hizo con un tampón

El acusado, N.H., esta mañana en la Audiencia Provincial de Murcia

El acusado, N.H., esta mañana en la Audiencia Provincial de Murcia / Juan Carlos Caval

Ana Lucas

Ana Lucas

Una vez le destrozó el rostro a golpe, otra vez la violó brutalmente en la cocina de la casa que compartía en la población de Balsicas, en Torre Pacheco, se lee en la calificación fiscal. La víctima así lo aseguró en día, aunque este martes, cuando han pasado casi cuatro años del arresto del hombre, ella prefería no seguir adelante con la acusación. No obstante, el juicio por agresión sexual y malos tratos se celebraba en el Palacio de Justicia de Murcia, y constaba de únicamente una sesión. Ya está visto para sentencia.

El sospechoso, N.H., se sienta este martes en el banquillo de la Audiencia Provincial de Murcia. La Fiscalía tiene claro que tiene que pasar en total 18 años entre rejas por las agresiones constantes, durante más de tres años, a la que fue su pareja. 

La vista comenzó a puerta cerrada, porque así lo pidió la fiscal y las partes se adhirieron a la solicitud. El motivo, lo delicado de los delitos que se le imputan a N.H., que está en libertad y llegó por su propio pie al juzgado de Ronda de Garay.

Además de la violación, la víctima (que declaraba este martes tras un biombo, para no ver al sujeto) sufrió desde la primavera de 2016, se lee en la calificación fiscal, “diferentes actos de violencia física, consistiendo en puñetazos en cara, estómago, espalda, patadas en la cara, así como de forma continua en el tiempo amenazas, vejaciones e insultos como “puta", “puta de mierda” “eres una basura”, “chatarra de mierda”, “cerda”, “asquerosa”, “sucia”, amedrentándola al dirigirle expresiones como “que la iba a matar si denunciaba", no la dejaba salir, le cerraba la casa, le quitaba el teléfono, realizando tales actos generalmente en el domicilio familiar, creando así el procesado un clima de temor y desasosiego en el ámbito de la relación".

La víctima permaneció sentada en el pasillo de la segunda planta del Palacio de Justicia de Murcia tras salir de declarar. Seria, no quiso comentar qué había dicho a los miembros del tribunal, aunque admitió que se siente tranquila porque el individuo, pese a estar libre, tiene prohibido acercarse a ella o comunicarse por medio alguno. No obstante, la mujer ya había manifestado su deseo de no seguir adelante con la acusación. Sin embargo, como ya había declarado en instrucción, tuvo que entrar en la sala.

En el interior de la sala, la mujer, defendida por la letrada Alicia García Cuartero, se desdijo y aseguró que N.H. no la violó: que las lesiones vaginales que presentaba se las hizo con un tampón.

Visto para sentencia

En cuanto al sospechoso, que, asistido por una traductora, respondió solo a las preguntas de su abogado, Miguel Baenas, subrayó que él no hizo nada y que fue todo un invento de ella porque él se iba a casar con otra mujer, que lo hizo por despecho.

También declararon este martes tres guardias civiles que se hicieron cargo del caso. Las testificales fueron muy breves, apenas duraron unos minutos. Los tres se ratificaron en lo que ya hicieron constar en el atestado policial en su momento. Uno de ellos recordó cómo llegó a solicitar una unidad médica de emergencia (UME) al ver que la víctima presentaba lesiones, producidas, presuntamente, por este hombre.

El caso ha quedado visto para sentencia. La fiscal, pese a lo que afirmó este martes la víctima acerca de que no había existido agresión sexual alguna, se ratificó y siguió pidiendo penas que suman un total de 18 años de cárcel para este sujeto, de origen magrebí, indican fuentes judiciales.

Además de la pena de cárcel, la representante del Ministerio Público solicita que el hombre indemnice a la que fue su pareja con 37.820 euros. También que, cuando este hombre salga de prisión, esté una década más en régimen de libertad vigilada.