Un chapero obliga a su cliente a hacerle una transferencia de 6.000 euros a punta de pistola en Los Alcázares

Un sujeto, que ofrecía sus servicios como chapero en Internet, ha sido detenido por, presuntamente, obligar a un cliente a hacerle una transferencia de 6.000 euros a punta de pistola en Los Alcázares. Junto a él fue arrestada otra persona que, presuntamente, estaría implicada en la trama mediante la cual sacarían dinero a hombres, muchos de los cuales no llegaban nunca a denunciar, por pudor.

La llamaron operación 'Versátil 25' y arrancó en Año Nuevo. Fue entonces cuando el hombre al que robaron se personó en el cuartel y lo contó: había entregado mucho dinero a una persona porque estaba siendo amenazado e intimidado.

Sexo por dinero

Según indicó este viernes la Guardia Civil en una nota de prensa, el afectado admitió que "había accedido a una web de contactos para mantener relaciones sexuales a cambio de dinero y había concertado una cita con un varón en el domicilio de la víctima". Antes, hablaron por WhatsApp y concretaron sitio, hora y precio.

"Fijaron la cita a última hora de la tarde", continúa el comunicado, que precisa que, cuando el anunciante llegó al domicilio de la víctima, "le requirió que le hiciera el pago por sus servicios mediante aplicación bancaria". Entonces el cliente le mandó un Bizum.

Más caro al ser de noche

"El ahora detenido le requirió de nuevo otro pago similar debido al horario nocturno y la víctima accedió al mismo; y, poco después le requirió un tercer pago en concepto de desplazamiento, que la víctima también formalizó", especifica la nota del Instituto Armado.

El cliente, al ver que el hombre cuyos servicios había contratado seguía pidiéndole dinero, le dijo que se fuese de su casa. El chapero no solo no se fue, sino que "continuó requiriéndole más pagos y de mayor cuantía", informa el cuerpo.

Amenaza con volver

La víctima contó que, como se negó a mandarle más dinero, el individuo sacó un revólver que llevaba oculto. Con él en la mano, intimidó al hombre y le obligó a que le hiciese una transferencia de 6.000 euros. Solo entonces se fue del domicilio, aunque le amenazó con volver para seguir pidiéndole dinero.

Tras la denuncia de la víctima, el caso recayó en la Policía Judicial de la Guardia Civil. "La principal línea de investigación llevó a los guardias civiles hasta dos personas, que, además tenían antecedentes por delitos similares", apunta el cuerpo.

Uno de ellos ofrecía sus servicios en la web; la otra persona "colaboraba con el primero a la hora de trasladarse hasta el domicilio de la víctima y recibía las transferencias bancarias.

Ya están en libertad

"También se ha constatado que el anunciante de la web de contactos tenía adquiridos servicios ‘premium’, para posicionar mejor sus ofertas, y estos gastos eran abonados por el colaborador", revela la Benemérita, que capturó a estas dos personas por los delitos de extorsión y estafa.

Las dos personas se encuentran en libertad con cargos.

La Guardia Civil tiene en su poder los teléfonos de los sospechosos, puesto que los terminales habrían sido empleados para cometer los delitos, con lo que estarían llenos de pruebas, aunque presumiblemente muchas borradas. Los móviles están siendo analizados para ver si dan con más víctimas de estas personas.

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