Detenido un exconvicto por amenazar a su tía con una motosierra en Murcia

Un exconvicto, español de 37 años de edad, ha sido detenido en el municipio de Murcia por, presuntamente, amenazar a su tía septuagenaria con una motosierra, indicaron fuentes policiales.

Los hechos tuvieron lugar sobre las ocho de la tarde de este miércoles, en una vivienda de la población murciana de Monteagudo.

La propia víctima dio la voz de alarma: un pariente suyo, drogodependiente, que reside con ella desde que salió de la cárcel, estaba en brote, muy agresivo, y la había amenazado de muerte. 

La mujer había conseguido escapar del domicilio y se había refugiado primero en un huerto cercano y luego en la casa de una vecina, desde donde llamó a Emergencias.

Sentía miedo

En su petición de auxilio, explicó que tenía miedo porque su sobrino había salido recientemente de prisión por un intento de homicidio con arma blanca.

Aunque el hombre es natural de un municipio costero de la Región, desde que lo excarcelaron vive con su familiar, a la cual en teoría ser encarga de cuidar. Sin embargo, debido a los problemas de adicciones a las sustancias, en ocasiones se pone nervioso, apuntaron, y llega a estar agresivo, como en este episodio. 

La ayuda se puso en marcha pronto. Al lugar se movilizaron efectivos de la Guardia Civil, los cuales procedieron al arresto del sospechoso, el cual se encontraba en el domicilio todavía a la llegada de los agentes.

La víctima, por fortuna, estaba ilesa y no precisó de asistencia sanitaria, por lo que no hubo que movilizar ambulancia al carril. 

El hombre (que, según fuentes cercanas al caso, tendría serios problemas de adicción a las drogas) fue puesto este viernes a disposición judicial como presunto autor de un delito de amenazas en el marco de la violencia doméstica. 

Juicio rápido

En los pasillos de los juzgados, el sospechoso se mostraba tranquilo, dijeron a este periódico fuentes judiciales. No negaba su participación en los hechos por los que había sido detenido. De hecho, horas después, cuando le tocó entrar en sala, lo reconoció.

En la Ciudad de la Justicia tuvo lugar un juicio rápido, en el transcurso del cual el sujeto admitió lo que hizo, fue condenado por amenazas y hubo conformidad: aceptó cuatro meses de cárcel y se le impuso una orden de alejamiento de su víctima, a la cual no podrá acercarse ni comunicarse con ella por medio alguno durante cuatro meses. Queda suspendida la pena privativa de libertad, aunque, si se aproxima a su familiar, incurriría en un delito de quebrantamiento de condena y sí ingresaría en el penal. 

La motosierra fue decomisada y trasladada al cuartel de la Benemérita en Santomera.