Sucesos

Tres agresiones en tres días: una presa ataca violentamente a una funcionaria en la cárcel de Campos del Río

Los trabajadores de prisiones llevan años pidiendo que se les reconozca el carácter de agente de autoridad en el trabajo. Además, más del 60% de los ataques tiene que ver con internos con patologías psiquiátricas, aunque en la Región de Murcia solo hay una psiquiatra para atender los dos centros

Celda de una prisión.

Celda de una prisión. / Pexels

Paula M. Gonzálvez

Paula M. Gonzálvez

La de este miércoles ha sido la tercera agresión en una cárcel de la Región de Murcia en tres días, concretamente en la de Campos del Río, según ha denunciado la Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias (ACAIP-UGT). Tras la bajada a las celdas, han relatado, una interna en actitud "muy agresiva" se ha dirigido a la oficina de las funcionarias. Cuando una de ellas se ha acercado para ver qué quería, la presa se "ha revuelto violentamente contra ella, golpeándola y lanzándola al suelo".

La trabajadora ha tenido que recibir atención médica en la enfermería y, posteriormente, ha sido trasladada al hospital para que se puedan valorar las lesiones que sufre en la espalda como consecuencia del ataque.

También este martes, una reclusa de 46 años insultó en el patio a una trabajadora que la condujo al interior para cachearla. La interna reaccionó golpeando y mordiendo a la funcionaria -que fue atendida en la enfermería- de una forma tan agresiva que fueron varias las compañeras que intervinieron para reducirla.

Habían pasado apenas 24 horas en Campos del Río desde la anterior agresión, en la que otra presa con patologías mentales fue llevada a aislamiento por golpear a otra de las funcionarias y arrancarle a tirones mechones de pelo.

CC OO denuncia que "Instituciones Penitenciarias no considerará 'agresión' el grave incidente" y que "no investigará el accidente laboral ni adoptará ninguna medida preventiva, tal como obliga la normativa en prevención de riesgos laborales".

Presos con patologías psiquiátricas

Además, apunta los tres factores "clave" que están generando estos problemas: la falta de personal, la falta de formación especializada y la falta de tratamiento específico para las patologías psiquiátricas.

Este último es, precisamente, "un problema que tiene cada vez una mayor incidencia dentro de las prisiones". Según datos aportados por el sindicato, más del 60% de las agresiones que sufre el personal penitenciario tiene que ver con internos con patologías psiquiátricas, aunque en la Región de Murcia tan solo hay una psiquiatra contratada para atender los dos centros penitenciarios (Murcia I y Murcia II), y únicamente realiza visitas cada quince días.

En España solo hay dos centros mentales penitenciarios, uno en Sevilla y otro en Alicante, por lo que los funcionarios tienen que lidiar con internos con patologías graves que no están siendo tratados adecuadamente.

Carácter de agente de autoridad

Por su parte, desde ACAIP reiteran su "malestar con la mala clasificación interior del centro de Campos del Río, así como con la falta de medios personales y materiales que impide realizar en condiciones el trabajo". A su vez, reivindican que se les reconozca "el carácter de agente de autoridad en el trabajo", algo que llevan pidiendo años, y solicitan también la formación continua.

El pasado verano, los funcionarios de prisiones aseguraron vivir "en un conflicto constante con la administración" desde septiembre de 2021 por el riesgo del personal y de los internos. Indicaron que cada 36 horas se produce una agresión en una prisión española. De entre las ocurridas en 2022, tres de ellas fueron muy graves y "los compañeros salvaron la vida de casualidad". CSIF, ACAIP y UGT contabilizaron 4.213 en 2021 y casi 5.000 incidentes.

Asimismo, denunciaron que hay módulos cerrados y hasta un 13% de la plantilla sin cubrir, y se puso de ejemplo el brutal ataque de un preso de Campos del Río a un funcionario al que "no le cortaron la yugular por 1,5 centímetros", al rajarle el cuello con una lata: fueron los propios internos quienes tuvieron que salvarlo dado que solo había tres compañeros repartidos en distintos módulos.