La jueza de guardia ha ordenado este sábado la libertad provisional, sin medidas cautelares, de la presunta autora el pasado miércoles del secuestro de un bebé recién nacido en el Hospital de Basurto, en Bilbao, según han informado fuentes judiciales.

La joven, de 24 años, que ha sido puesta a disposición judicial este sábado, tras pasar dos días en dependencias policiales, ha reconocido los hechos ante la jueza y ha pedido ingresar en un centro psiquiátrico, según ha señalado su abogado, Andrés Falceto, a los medios de comunicación antes de conocerse la decisión del juez.

Cerca de las 20:20 horas, la joven salió de los juzgados cubierta con un chubasquero y una mascarilla que le cubría la cara, acompañada de una allegada y su abogado.

En esta ocasión, el letrado no se ha parado a hacer declaraciones a los periodistas, que durante horas han esperado en el exterior de los juzgados la decisión judicial.

Los informadores han acompañado durante un trayecto a la joven y al letrado, con el visible enfado de la allegada que la acompañaba, quien ha recriminado a los periodistas su actitud.

En su declaración ante la jueza de guardia, la joven ha reconocido los hechos y ha señalado que, tanto ella como su familia, querían el ingreso voluntario en un centro psiquiátrico. El próximo lunes tienen previsto solicitarlo formalmente.

La jueza de guardia ha ordenado la libertad provisional para la acusada sin ningún tipo de medida, aunque no se ha hecho público el auto en el que argumenta su decisión. Ahora el procedimiento continúa y el caso pasará a otro juzgado para su instrucción.

El pequeño Aimar se encuentra desde este jueves en su hogar tras recibir el alta del hospital, donde fue arrebatado a sus padres por la joven de 24 años que se hizo pasar por sanitaria del centro.

La sustracción del bebé se produjo sobre las nueve de la noche del miércoles y en la mañana del jueves, la presunta autora del secuestro dejó al bebé sobre el felpudo de un piso del barrio de Santutxu, donde el pequeño fue hallado en buen estado sobre las 8:30 horas.

Unas dos horas después, la secuestradora, que había comentado a vecinos y conocidos que estaba embarazada y que ya había comprado ropa y una silla de bebé, fue detenida en el barrio bilbaíno de Zorroza.