Johan Styven P. O., asesino confeso de una menor de edad en un trastero de Totana, cosió a cuchilladas a la chica y, cuando lo hizo, era perfectamente consciente de sus actos. Los médicos forenses que han realizado un estudio sobre la personalidad del joven, investigado por matar a cuchilladas a su exnovia, de 17 años de edad, han concluido que no padece ningún trastorno mental que incidiera en sus capacidades volitivas e intelectivas en el momento de los hechos.

El informe, incorporado a las investigaciones que dirige un juzgado de Instrucción de Totana, destaca también que no está probado que, como alega ahora el joven, en el día de los hechos se encontrara bajo los efectos del consumo de drogas.

El documento de los forenses recoge que, tras la detención se le pidió someterse a la realización de unos análisis para comprobarlo, a lo que se negó porque, dijo entonces, tenía que hablarlo con el letrado que se iba a ocupar de su defensa.

Para los autores del informe, el chico, que tenía 19 años cuando mató a puñaladas a la joven Claudia Abigail, es plenamente responsable de sus actos, al no estar afectado por trastorno alguno que pudiera anular sus facultades o afectarle ni siquiera de manera leve.

El cuerpo sin vida de la joven fue hallado en el trastero del garaje del edificio donde el presunto autor del apuñalamiento residía con su madre, dos hermanos y otro hombre al que tenían una habitación alquilada.