"Soy inocente de todo lo que se me está acusando", asegura el presunto pederasta Nacho Jacob, que está en libertad con cargos por, presuntamente, violar y prostituir a menores de edad.

El sospechoso atendía, a la salida de su domicilio de Madrid, a una reportera de Telecinco y le dijo que "es una auténtica barbaridad lo que están diciendo", ya que él es "incapaz de hacer cualquier acto así".

A la pregunta de la reportera de si le han tendido una trampa, el conde de Pozos Dulces, que contrató los servicios del penalista murciano Raúl Pardo-Geijo,afirmó que el caso está "en secreto sumarial", así como que "todo se va a ir resolviendo". "Estoy muy tranquilo moralmente, súper tranquilo", remarcó el aristócrata en declaraciones a la citada cadena de televisión.

Durante su estancia en la cárcel de Sangonera, según indicaron fuentes cercanas, presumía de que él iba "a salir pronto": dos semanas ha tardado. Este sujeto está en libertad desde la semana pasada porque el titular del Juzgado de Instrucción Nº 7 de Murcia, el mismo que hace unas semanas lo mandaba a Sangonera, desoyó la petición del Ministerio Público y permitió que el aristócrata madrileño, conde de Pozos Dulces, abandonase este mismo viernes la prisión, tras haber abonado una fianza de 40.000 euros.

En su escrito, la Fiscalía argumentaba que este individuo tenía que seguir encerrado porque la prisión preventiva, recordaba, "persigue evitar el riesgo de reiteración delictiva, riesgo objetivo a la vista de los datos de los que se dispone. así como evitar que el riesgo de que el detenido pueda intentar obstaculizar la instrucción judicial (aún en su primera fase, intentando condicionar o mediatizar posibles fuentes de prueba) así como riesgo de fuga (también objetivo y que una fianza no se considera que eliminaría, a la vista de la gravedad de la pena asociada a los delitos por los que está siendo investigado".

Los investigadores de la Policía Nacional tienen indicios, y así lo comunicaron a la autoridad judicial, de que este individuo (de 51 años, aunque él en su currículum pone que tiene 42), obligó al niño al que presuntamente violó en Murcia a grabar un audio diciendo que tenía 16 años. Lo hizo "por si los paraba la Policía", indican fuentes cercanas al caso, del que se ocupa la Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM) de la Policía Nacional.