Jorge Ignacio P.J., supuesto asesino de Marta Calvo, Arliene Ramos y Lady Marcelas, ha defendido en el juicio que se sigue contra él, en el turno de la última palabra, que no ha quitado la vida a nadie: "Lo único que puedo decir es que no le he quitado la vida a nadie, no he drogado a nadie, no he violado a nadie ni he puesto droga a nadie en sus órganos genitales".

El acusado, a quien se le atribuye, además, otros siete delitos de abusos sexuales a otras jóvenes --todas ellas prostitutas--, ha señalado que siente "mucho" el dolor que pueda tener la familia de Marta Calvo por no haber encontrado el cuerpo, pero dijo "lo que ocurrió con todo lujo de detalles. No tengo nada más que aportar", ha manifestado.

Jorge Ignacio se enfrenta a la prisión permanente revisable, tal y como reclaman algunas acusaciones, mientras que la Fiscalía le solicita 120 años de prisión, 10 años menos que lo que requería inicialmente tras retirarse una de las víctimas como acusación, que no quiso declarar en el juicio. Le atribuye tres delitos de homicidio y 10 abusos sexuales.

Este miércoles también ha presentado su informe la abogada de Jorge Ignacio que, tras criticar que este asunto está "absolutamente contaminado", se ha centrado en las muertes de las supuestas víctimas y ha indicado que no se ha demostrado en el acusado ningún ánimo de matar. "En este juicio no hay ni una sola prueba contra Jorge Ignacio", ha apostillado.

En relación con Marta Calvo, ha lamentado que se haya cuestionado por parte de las acusaciones la versión del descuartizamiento del cadáver y ha insistido en que "no se sabe lo que pasó". "Pudo morir por una ingesta de cocaína pero por desgracia no esta el cuerpo", ha aseverado.

En esta línea, ha recordado al jurado que Marta, antes de estar con Jorge Ignacio, estuvo con otro cliente y consumió droga. "Aquí hay prueba de un problema de adicción; hay prueba de una persona que suministraba estupefacientes a Marta; y de lo que no hay prueba contundente es de la culpabilidad de mi cliente", ha repetido.

Así mismo, la abogada se ha referido a las muertes de Arliene y de Lady Marcela. Sobre la primera, ha señalado que la forense aseguró que no había muerte por sobredosis y ha puntualizado que no se ha demostrado que la droga hallada en su mesa de noche fuera del acusado.

En relación con Lady Marcela, ha puntualizado que se recogieron muestras de AND en su cuerpo de dos varones, uno de ellos Jorge Ignacio, pero ha puntualizado que él nunca ha negado que estuviera con ella. Lo que sí ha negado es que la matara, ha matizado.

Sobre los delitos de abuso sexual imputados a Jorge Ignacio, la letrada ha señalado que "sí es sí, aquí y en cualquier otro sitio". "Se contrató un servicio, en el que se aceptó hacer una fiesta blanca, y se dijo que sí. Y todo sin introducción de droga en los genitales, ya que lo niega mi representado", ha señalado. Además, ha advertido de que cuando las mujeres le pedían parar, "él lo hacía". "Todas accedieron", ha apostillado.

Así mismo, ha recordado que el acusado acompañó al tren a alguna de las supuestas víctimas o les ayudó a ducharse cuando se sintieron indispuestas. "¿Dónde está ahí el ánimo homicida? ¿Qué asesino en serie intenta reanimar a sus víctimas", ha interpelado, al tiempo que ha matizado que "un asesino en serie que se quiere cargar a todo el mundo no deja su rastro en su mail, donde aparecía su nombre y apellido".

Por otro lado, respecto al delito contra la salud pública, la letrada ha subrayado que a lo largo del juicio no ha habido ningún informe ni ningún acta de aprehensión de cocaína o alguna sustancia similar. "Nos guste o no, no hay un ápice de droga intervenida", ha resaltado.

Las víctimas describieron, ha recordado, que el acusado llevaba una bolsa con droga y se la ponía por el cuerpo, y al respecto la abogada ha comentado que "parece que todo está guionizado", y se ha preguntado: "¿Por qué puede haber un móvil espúreo? Las víctimas de violencia de género y de las agresiones sexuales tienen derecho, si son españolas, a una prestación económica y otra serie de ayudas. Y las extranjeras, además, tienen derecho a que se les dé el permiso de residencia. No puedo decir que lo hayan hecho por eso pero lo dejo caer", ha manifestado.

Así mismo, en relación con el delito contra la integridad moral, la abogada ha manifestado que no se ha demostrado: "Se nos pide este delito porque la madre de Marta Calvo cree que se le está humillando al no decir Jorge Ignacio dónde está el cuerpo, pero nada más lejos de la realidad. Desde el primer momento dijo dónde estaba el cuerpo", ha defendido. "Ahora no se creen las acusaciones que se haya desmembrado el cuerpo pero esto sólo son sospechas y conjeturas", ha añadido.

La madre de Marta Calvo, abatida al final del juicio

La madre de Marta Calvo, Marisol Burón, se ha mostrado abatida al concluir el juicio contra Jorge Ignacio Palma, y después de dos años y medio sin conocer el paradero del cuerpo de su hija, y ha tachado de mentiras algunas afirmaciones de la defensa del acusado.

Al concluir la sesión, Marisol Burón, acompañada del portavoz de la familia materna de Marta Calvo, Mariano Navarro, ha calificado de mentiras algunas afirmaciones realizadas por la defensa del acusado, como la supuesta adicción a las drogas de su hija.

Entre lágrimas y muy emocionada, ha afirmado a los medios de comunicación a las puertas de la Ciudad de la Justicia de València que lo peor de las conclusiones finales de la defensa de Jorge Ignacio Palma ha sido "rebajar y humillar" a las víctimas, que han hecho el esfuerzo de declarar durante el juicio "y revivir todo lo que habían pasado".

Marisol Burón ha manifestado que lo que más le duele es desconocer dónde está el cuerpo de Marta Calvo, desaparecida en noviembre de 2019 tras citarse con Palma en su casa de Manuel (Valencia), donde el acusado afirma que la desmembró y tiró por partes a contenedores después de despertar y ver que la joven había fallecido.

El portavoz de la familia materna ha dicho que Marisol está cansada después de este tiempo de espera, de agotamiento, de fuerte desgaste emocional, en referencia al juicio, al que se suman los dos años y medio que llevan buscando a Marta y la angustia, impotencia y frustración de haber acabado el juicio sin conocer el paradero de la joven, "lo más traumático para todos, sobre todo para la madre".

Mariano Navarro ha manifestado que no solo el jurado popular sino toda España sabe que el acusado "es un asesino en serie, es un criminal y es un psicópata", se ha comprobado "por activa y por pasiva", por todos los forenses, los peritos y todas las personas que han entrevistado.

"Cada vez que ha estado con una chica le ha puesto un arma en la cabeza a modo de droga, y ha disparado sabiendo que con ello podía morir; no ha tenido ningún problema en asumir ese riesgo porque en ese riesgo estaba su goce, el placer que obtenía a través de ese comportamiento libidinoso, patológico y criminal", ha indicado.

Ambos han agradecido a los medios de comunicación haber sido su voz durante el proceso judicial.