Los hechos que ahora llegan a juicio tuvieron lugar hace nueve años, en la localidad de Lorquí. Casi una década después, tres sospechosos se sientan en el banquillo por intentar acabar con la vida de un hombre, al que presuntamente acuchillaron. 

La Audiencia Provincial de Murcia juzgará este miércoles a tres miembros de una familia que están acusados de intentar acabar con la vida de un vecino de Lorquí, al que propinaron varias puñaladas con un cuchillo jamonero, causándole lesiones que tardaron casi un año en sanar

Los acusados, según se recoge en el escrito de conclusiones provisionales del Ministerio Público son F.G.A., para el que se solicitan nueve años y once meses de prisión, y M.G.A. y L.F.A., para los que se reclaman siete años. Las dilaciones indebidas, al haber pasado tanto tiempo, se presupone que serán tenidas en cuenta.

Los hechos se produjeron en la tarde del 11 de septiembre de 2012, cuando, acompañados de varios hombres y mujeres no identificados, se dirigieron hacia la vivienda de un hombre con el que uno de los procesados había mantenido una discusión poco antes. Una vez allí, el principal acusado, F.G.A., presuntamente, le asestó varias puñaladas con el cuchillo mientras M.G.A. lo sujetaba del brazo.

Después, los dos, siempre según la Fiscalía, cogieron ese arma y le asestaron una puñalada en el vientre, «y una vez el cuchillo en su interior, realizaron movimientos circulares», y, por su parte, el tercer acusado, L.F.A., asestó, supuestamente, una puñalada con un machete al suegro de la víctima, produciéndole heridas que tardaron noventa días en curar.

La acusación estatal solicita también que los procesados indemnicen al herido más grave con 28.390 euros, y a su suegro, con 11.900.

Uno de los sospechosos, tal y como refleja la calificación fiscal, «sufre un trastorno de la personalidad de carácter crónico con parcial afectación de las bases psicobiológicas de la imputabilidad en relación a los hechos».