Agentes de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Policía Nacional de Murcia capitaneaban el despliegue que, por segundo día consecutivo, alertaba a los residentes del Espíritu Santo, una de las barriadas más deprimidas de Espinardo, tristemente conocida por el trapicheo de estupefacientes que se da en sus calles y casas.

Vecinos de la calle San Ignacio de la población se sobresaltaron ante el amplio despliegue de vehículos y agentes. Los investigadores sacaron de los registros varias cajas llenas de marihuana: de algunas, a reventar, sobresalían tallos verdes, ya crecidos. El arrestado este martes, con los grilletes puestos, fue trasladado desde Santomera para que estuviese presente en los registros.

Agentes de la Policía Nacional trasladan al sospechoso. Israel Sánchez

Por otro lado, aunque también en el marco de la lucha contra el tráfico de drogas, dos sospechosos buscados por la Unidad de Droga y Crimen Organizado (Udyco) por tráfico de drogas se presentaban en dependencias policiales. El lunes, la Policía llevó a cabo otra redada, también en la pedanía murciana, que se saldó sin arrestos.

En el despliegue de ayer también estuvieron efectivos de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) y del Grupo Operativo de Respuesta (GOR) de Murcia.

El fin de estos operativos es desmantelar plantaciones de marihuana ocultas en viviendas en su tiempo okupadas precisamente para cultivar droga, aseguran los residentes en la zona, vecinos que insisten en que es insoportable la convivencia con algunos de estos traficantes, muy dados también a organizar fiestas multitudinarias que vulneran la normativa anticovid.