Los Mossos han detenido a 16 personas de nacionalidad albanesa como presuntos integrantes de una red criminal que cultivaba y comercializaba marihuana a gran escala para abastecer al mercado europeo.

Los Mossos han informado este domingo en un comunicado de que en la operación han decomisado 12.212 plantas de marihuana en diferentes municipios, 113 kilos de cogollos, dos armas de fuego, 98.000 euros y cuatro vehículos.

La policía catalana estima que las sustancias decomisadas tendrían un valor de mercado de un millón de euros y que la organización obtenía en torno a cuatro millones de beneficio anual con la venta de la droga.

La operación que condujo a la desarticulación del grupo se desarrolló el pasado día 11 con la participación de más de cien agentes, jornada en la que se practicaron ocho entradas y registros en siete casas y una nave industrial en los municipios catalanes de Blanes, Sant Cebrià de Vallalta, Vilanova del Vallès, Caldes de Montbui, Castellar del Vallès y Sallent.

La investigación del caso comenzó el pasado año y el trabajo permitió localizar una casa en Sant Cebrià de Vallalta donde se cultivaba marihuana y otra en la zona de Tordera dedicada también a este cultivo.

A partir de aquí, los investigadores conocieron que los responsables de esos cultivos utilizaban varias casas en urbanizaciones de diferentes poblaciones, donde se había implantado complejas instalaciones eléctricas y conexiones fraudulentas a la red para conseguir plantaciones a pleno rendimiento.

Los propietarios de las explotaciones trabajaban con un esquema de coordinación para recoger la marihuana, envasarla y venderla posteriormente o trasladarla al lugar de destino.

Los albaneses que integraban la organización distribuían la producción en otros países de Europa con un precio por kilo que podía llegar a los 5.000 euros.

Con los beneficios de esas ventas volvían a comprar nuevas viviendas o naves industriales para ampliar su actividad ilícita.

Los detenidos tienen entre 20 y 49 años y la mayoría carece de antecedentes.

El pasado viernes pasaron a disposición del Juzgado de Instrucción de Arenys de Mar (Barcelona), que decretó el ingreso en prisión para dos de ellos y libertad con cargos y medidas cautelares para el resto.