La Audiencia Provincial ha condenado a un universitario de Alicante a penas que suman 180 años de prisión por 38 delitos de producción y distribución de material pornográfico con menores de "carácter degradante o vejatorio", según se recoge en una sentencia de la Sección Tercera. El tribunal ha descartado rebajarle pena por trastorno mental como alegó el acusado.

La Guardia Civil, que fue alertada por el FBI y llevó a cabo la investigación, le intervino en su domicilio más de 300 archivos de contenido pedófilo elaborados a través de internet, aunque ninguna de las 38 víctimas del procesado, de entre 12 y 16 años, ha podido ser identificada y proceden de otros países.

A pesar de la elevada condena, el acusado, de 35 años y estudiante de ingeniería, deberá cumplir un máximo de 18 años de cárcel, según señala el fallo de la Audiencia de Alicante.

Los hechos declarados probados en la sentencia ocurrieron entre 2014 y 2018. El acusado accedió desde su domicilio con diversos seudónimos a una página web de gustos pedófilos e inició conversaciones con cientos de menores edad. Las víctimas pensaban que estaban interactuando con una persona próxima a su edad y de este modo el procesado fue captando a menores que atrajo a salas de chat donde logró que se desnudaran ante la cámara web de su ordenador y realizaran diveros tipos de prácticas sexuales.

Para ello se valió de "técnicas de engaño e ingeniería social" y fue creando archivos de contenido sexual donde salían menores de edad. Las grabaciones de porno infantl fueron emitidas en ocasiones a través de plataformas digitales.

A finales de enero de 2018 la Guardia Civil le detuvo y en el registro de su domicilio en Alicante intervinieron 330 archivos de contenido pedófilo y seis dvd con vídeos donde el acusado interaccionó con menores induciéndolas a participar en comportamientos de índole sexual, indica la sentencia.